La pregunta de cuándo se empiezan a sentir los efectos del envejecimiento cerebral tiene una respuesta científica: existen tres momentos clave, y el primero ocurre antes de los 60 años. Un grupo de investigadores del Primer Hospital Afiliado a la Universidad de Zhengzhou, en China, descubrió que ciertos cambios en el cerebro están relacionados con el aumento de los niveles de 13 proteínas específicas. Según el estudio, estas transformaciones ocurren principalmente a los 57, 70 y 78 años.

Los expertos subrayan que estas edades representan momentos cruciales para implementar estrategias destinadas a preservar la salud cerebral por más tiempo. Entre las proteínas analizadas, el Brevican (BCAN) despertó especial atención, ya que está asociado a condiciones como demencia, accidentes cerebrovasculares y trastornos motores. Otra proteína clave, conocida como GDF15, también está vinculada a enfermedades relacionadas con el envejecimiento.

El análisis, basado en muestras de plasma sanguíneo de más de cinco mil británicos entre 45 y 82 años, destaca un dato alarmante: en 2050, la población mundial mayor de 65 años superará los 1.500 millones de personas. Este panorama resalta la importancia de comprender a fondo el proceso de envejecimiento cerebral.

“Estos hallazgos ayudan a llenar vacíos cruciales en el conocimiento de los mecanismos moleculares del envejecimiento cerebral, con implicaciones importantes para el desarrollo de biomarcadores y objetivos terapéuticos personalizados para trastornos cerebrales relacionados con la edad”, enfatizaron los investigadores.

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Otros estudios apoyan el impacto del envejecimiento

Los resultados de esta investigación contribuyen al creciente interés por identificar los momentos en que el cuerpo sufre mayores cambios relacionados con la edad. En septiembre, un equipo de Stanford observó que los efectos del envejecimiento, como el metabolismo más lento, la aparición de arrugas en la piel y el aumento de la vulnerabilidad a enfermedades, alcanzan picos significativos entre los 44 y los 60 años.

Michael Snyder, profesor de genética en Stanford, explicó: “Las personas asumen que todos envejecen gradualmente. Sin embargo, la mayoría de los cambios no son lineales”.

Los especialistas recomiendan que las personas en esta franja de edad prioricen una dieta equilibrada y realicen actividad física frecuente, medidas que pueden mitigar los efectos del envejecimiento acelerado en estas décadas clave.

Las edades en las que el cuerpo presenta un envejecimiento más acelerado, según el estudio

El envejecimiento es un fenómeno natural que se manifiesta a través de transformaciones físicas, químicas y funcionales en el organismo, incluyendo el deterioro de los tejidos, una menor capacidad de regeneración celular y una disminución en la eficiencia de sistemas esenciales como el inmunológico y el cardiovascular.

Aunque estos cambios suelen desarrollarse de manera progresiva, una investigación de la Universidad de Stanford reveló que el envejecimiento corporal tiene dos momentos significativos de aceleración: a los 44 y a los 60 años. Según el estudio, publicado en la revista Nature Aging, en estas etapas ocurren alteraciones “dramáticas” en el funcionamiento del cuerpo humano.

“No solo estamos cambiando gradualmente con el tiempo; hay cambios dramáticos”, afirmó Michael Snyder, profesor de genética en Stanford y principal autor del estudio.

El estudio analizó a 108 participantes, examinando alrededor de 135.000 moléculas y microorganismos presentes en sus cuerpos. Los investigadores identificaron que las alteraciones más perceptibles ocurren en dos momentos específicos: al llegar a los 40 años y al alcanzar los 60 años.

Impactos en el cuerpo en cada etapa

En el primer grupo, individuos de 44 años experimentaron transformaciones moleculares relacionadas con el metabolismo lipídico, el consumo de cafeína y alcohol. Por su parte, en el grupo de 60 años, los cambios estaban vinculados al metabolismo de carbohidratos, la función renal, la regulación inmunológica y las condiciones cardiovasculares. “Al observar los grupos de moléculas con mayores cambios en cantidad, descubrieron que estas transformaciones ocurrieron con mayor intensidad en dos periodos de tiempo: al llegar a los 40 y pocos años, y al alcanzar los 60 años”, concluyó el artículo de Stanford.