Southampton volvió rápido a la Premier League. Luego de una temporada en la Championship tras haber descendido, el equipo del sur de Inglaterra derrotó este domingo por 1 a 0 a Leeds United, en Wembley, y conquistó el tercer y último ascenso a la primera división del fútbol inglés en lo que fue “el partido más caro del fútbol”. Con esta conquista acompañará a Leicester y a Ipswich a la Premier League, que comenzará en agosto.

Adam Armstrong, a los 23 minutos de la primera etapa, marcó el único gol del partido disputado en la soleada Londres. La acción comenzó en el medio campo y quien recibió en tres cuartos de la cancha fue William Smallbone. El irlandés habilitó a Amstrong con un milimétrico pase adentro del área, el delantero quedó mano a mano con el arquero Illan Meslier y definió al segundo palo para el delirio de los hinchas de Southampton.

Luego, la definición tuvo momentos apasionantes. Leeds pudo igualarlo en algunas ocasiones, pero se chocó con el arquero Alex McCarthy, que fue suplente durante toda la temporada, y sólo atajó ocho partidos debido a que debió reemplazar a su compañero Gavin Bazunu, quien sufrió una lesión por la que se perdió la recta final del campeonato.

Cuando el árbitro del partido John Brooks pitó el final del partido, la mitad del mítico estadio de Londres ocupada por los hinchas de Los Santos festejó su regreso a la Premier League, luego de haber descendido en la temporada 2022/23. Además, se quedó con el denominado “partido más rico del mundo”, debido a la gran suma de dinero que ingresa a sus arcas al equipo que la obtiene.

Según el sitio web oficial de Wembley, Southampton “recibe alrededor de 100 millones de libras esterlinas (127 millones de dólares) tras el ascenso a la Premier League” y la cifra casi se duplica si el club permanece en la liga durante una temporada”. Además, se estima que los ganadores recibirán una recompensa de 265 millones de libras esterlinas (470 millones de dólares) en acuerdos televisivos, patrocinio y fuentes de ingresos adicionales.

Pero los ingresos no se detienen ahí: el Sports Business Group de la consultora Deloitte dice que el ganador recibe otros 170 millones de libras (211 millones de dólares) a lo largo de tres temporadas a través de los derechos televisivos de la Premier League, más otros conceptos como la retransmisión internacional, ingresos comerciales de la competencia y premios por la posición final del equipo.

Esta cifra aumenta a 360 millones de dólares (290 millones de libras esterlinas) si el club evita el descenso en su primera temporada. Números impresionantes para el fútbol mundial, teniendo en cuanta, por ejemplo, que Manchester City desembolsó un total de 81,4 millones de dólares por quedarse con la última Champions League disputada el año pasado.

El argentino Carlos Alcaraz, ahora a préstamo en Juventus de Italia, jugó en la primera parte de este campeonato, en el que aportó 4 goles en 26 partidos disputados en el segundo semestre de 2023.

Por ganar esta final, Southampton, fundado hace 138 años, se sumará a Leicester City, que se coronó campeón de la Championship, y a Ipswich, el equipo que logró el ascenso directo a la Premier League para la próxima temporada por haber salido segundo en la tabla de posiciones. Southampton llegó a esta definición en Wembley tras eliminar a West Bromwich en las semifinales, con un global de 3 a 1. Luego de una temporada, el equipo del que es dueño Rishi Sunak, primer ministro británico, regresan a la máxima categoría del fútbol inglés.