En la comunidad costera de Camden, ubicada en el estado de Maine, en EE.UU., se llevó a cabo un acto de vandalismo que involucró algunos árboles de la zona y que desató una ola de indignación entre los residentes locales.

Amelia Bond, exdirectora ejecutiva de la Fundación St. Louis, y su esposo Arthur Bond III fueron acusados de envenenar los troncos que se encuentran en la propiedad de su vecina, con la intención de mejorar la vista desde su ya lujosa propiedad de verano.

El incidente ocurrió en 2021, cuando Amelia Bond aplicó un herbicida cerca de los robles que se encontraban situados en la propiedad de Lisa Gorman, con el objetivo de que murieran lentamente. El químico utilizado se llama tebutiurón y es conocido por su capacidad para matar plantas y contaminar el suelo durante largos periodos.

Este compuesto ya había sido protagonista de otro caso similar en Alabama, en 2010, cuando un seguidor de fútbol universitario envenenó los robles de Toomer’s Corner como venganza hacia una universidad rival, lo que ocasionó graves consecuencias legales para el responsable, Harvey Updyke.

En cuanto al episodio en Camden, la mujer utilizó este herbicida para eliminar los árboles de una propiedad vecina, para así poder tener vista directa al mar. De esa manera, subiría el valor de su propiedad, que está cotizada en 3,5 millones de dólares, según informó Daily Mail. No obstante, la sustancia se filtró en un parque cercano y en la única playa pública de la comunidad, lo que produjo un fuerte daño ambiental.

En este caso, el móvil no sería una revancha, sino el interés de la pareja por valorar su vivienda. Al sacar los árboles, podrían tener vista directa hacia el mar.

Paul Hodgson, residente local, expresó su frustración ante a la agencia AP: “Cualquiera lo suficientemente tonto como para envenenar árboles junto al océano debería ser procesado”. La opinión de este hombre, es la de muchos dentro de esta ciudad, que tiene tan solo 5000 habitantes que disfrutan de la naturaleza de las montañas y el océano Atlántico a la vez.

Cómo sigue la denuncia contra la pareja que envenenó los árboles

La resonancia del caso ha sido tan fuerte en Maine, que el fiscal general inició una investigación. Según documentos oficiales, los Bond acordaron pagar más de US$1,7 millones en multas y acuerdos, además de otros costos adicionales para pruebas medioambientales. De esta forma se proponen terminar con el asunto y seguir adelante.

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Cuando los árboles y otra vegetación comenzaron a morir, Amelia Bond le dijo a Gorman en junio de 2022 que las plantas no se veían bien y se ofreció a compartir el costo de retirarlos, según escribió en el expediente judicial el abogado de la afectada. En cambio, la demandante hizo analizar los árboles, descubrieron el motivo y pronto intervinieron abogados.

Para muchos en Camden, el comportamiento de esta pareja encaja con el estereotipo de los residentes adinerados de verano que actúan sin consideración hacia los residentes permanentes, la belleza natural de la zona y la tranquilidad de la zona. No obstante, otros señalan que la comunidad también alberga residentes acomodados que violan las reglas sin enfrentar consecuencias visibles debido a su considerable fortuna.