Gavin Newsom advirtió por riesgo de “inundaciones y desplazamientos de tierra” ante las tormentas postincendios
El clima en ...
El clima en California cambió drásticamente. El sur del estado, afectado por una de las temporadas más secas en años, experimentó una serie de tormentas que llegaron a aliviar parcialmente los incendios forestales. Sin embargo, también surgieron otros peligros. Las autoridades advirtieron sobre el alto riesgo de inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra en las áreas recién afectadas por el fuego. El gobernador Gavin Newsom no tardó en emitir una alerta a la población.
El impacto de las lluvias en las áreas devastadas por los incendios en CaliforniaLas lluvias que cayeron el fin de semana pasado fueron un alivio, pero también aumentaron los riesgos. La combinación de suelos quemados y agua caída generó un escenario peligroso. La tierra que fue devastada por los incendios, como las áreas cercanas a los puntos de Palisades y Eaton, se volvió incapaz de absorber las precipitaciones. Esto provocó que el agua causara deslizamientos de tierra y flujos de escombros.
El Departamento de Bomberos de California alertó sobre este fenómeno, al indicar que las precipitaciones intensas pueden generar grandes movimientos de tierra.
Ante este panorama, el gobernador Newsom resaltó a través de un reposteo en su cuenta de X: “La lluvia es un alivio bienvenido después de los incendios forestales, pero puede causar desastres secundarios”. Es que el agua, en lugar de ser absorbida por el suelo, es repelida por el terreno quemado. Un fenómeno similar al que ocurre en pavimentos, lo que puede llevar a deslizamientos peligrosos en terrenos ya debilitados.
Los incendios y la erosión del suelo en CaliforniaLos incendios Palisades y Eaton, que arrasaron miles de hectáreas, dejaron un rastro de erosión que pone en peligro la estabilidad del terreno. Aunque las llamas están parcialmente contenidas, las grietas en el suelo son una amenaza. Las lluvias recientes y las previstas para los próximos días pueden empeorar esta situación.
Si bien el Servicio Meteorológico Nacional de Estados Unidos indicó que los flujos de escombros no son necesariamente el escenario más probable, la intensidad e incertidumbre del clima generan gran preocupación. Las previsiones de fuertes lluvias y nevadas también agravan el panorama, especialmente en las zonas montañosas, donde el riesgo de desastres naturales es aún mayor.
Preparativos ante nuevas lluvias y nieveEl pronóstico meteorológico para los próximos días apunta a nuevas lluvias intensas, con acumulaciones que podrían alcanzar hasta 6,35 milímetros en las áreas urbanas de Los Ángeles. En las zonas montañosas, las nevadas podrían ser considerables, con acumulaciones de hasta 45 centímetros de nieve. Esto traerá consigo más riesgos, como granizo y ráfagas de viento, que podrían agravar aún más la situación en áreas ya debilitadas por los incendios. En algunas áreas, como Baldwin Park, ya se emitieron advertencias para que la población esté lista ante un posible desastre.
California tiene por delante una temporada climática impredecible, en la que la lluvia, que normalmente sería un alivio, se presenta ahora como una espada de doble filo. Si bien es cierto que las precipitaciones ayudan a sofocar los incendios forestales, también aumentan los riesgos de inundaciones y deslizamientos de tierra en áreas que aún se recuperan de las devastadoras llamas. Por eso, las autoridades insisten en que la población debe mantenerse alerta y seguir las recomendaciones locales para evitar tragedias adicionales.