Analía Molina tenía 33 años y era madre de dos niños. Vivía en la localidad cordobesa de James Craik. Este sábado por la madrugada, la mujer, que trabajaba en uno de los peajes que tiene la concesión de la autopista Rosario-Córdoba a la altura de esa ciudad, murió tras ser atropellada por un automovilista. El conductor había escapado de un control vehicular porque, después se supo, el rodado era robado y fue entonces que arrolló a la víctima. Por estas horas, la Policía local intenta dar con su paradero y el de su acompañante, quienes lograron huir a pie luego del incidente.

El hecho tuvo lugar el sábado alrededor de las 3.30. Un Volkswagen Polo fue obligado a detenerse en un control de rutina de la Policía Caminera de Córdoba, pero el conductor del auto decidió hacer caso omiso de la orden tras advertir la presencia de los uniformados, aceleró y escapó del lugar.

El sospechoso avanzó a máxima velocidad unos metros y cuando estaba por pasar por el peaje atropelló a Molina. “Analía justo estaba cruzando para llevar la plata de la caja a la administración cuando la chocaron. Sus compañeros presenciaron todo y quedaron devastados por completo”, indicó el secretario general de Unión de Empleados de la Construcción y los Peajes del Interior (UDI), Gustavo Rossi, en diálogo con El Doce TV.

Si bien la víctima fue trasladada de urgencia hasta el hospital local de James Craik, el parte médico indicó que Molina ya había ingresado al centro asistencial sin signos vitales.

🏴Compañeros/as, lamentamos informarles que en el peaje de James Craik, un auto que se fugó atropelló a la compañera Analía Molina, que termina falleciendo en el hospital de James Craik. QEPD y Nuestras condolencias para su Flia

Mientras los compañeros de la empleada la asistían, el conductor del Polo huyó y circuló unos 1000 metros más hasta que frenó y descendió del automóvil en la banquina junto a su acompañante. La dupla comenzó a correr por el medio del campo que está ubicado al costado de la autopista. El vehículo abandonado.

Los investigadores constatarían después del siniestro que ese auto, que circulaba en sentido Villa María-Córdoba, había sido robado en la capital cordobesa el pasado 13 de agosto y tenía un número de patente cambiado. Los especialistas esperan que las cámaras del peaje puedan proporcionar información crucial para identificar al conductor responsable.