Encontraron muertos a dos estudiantes dentro de un departamento e investigan si fue por un escape de gas
Dos estudiantes fueron encontrados muertos en un departamento de la capital santafesina y las autoridades investigan si la causa fue una intoxicación por monóxido de carbono. Se trata de una de l...
Dos estudiantes fueron encontrados muertos en un departamento de la capital santafesina y las autoridades investigan si la causa fue una intoxicación por monóxido de carbono. Se trata de una de las formas que, año a año, se llevan vidas en el país en la época de frío.
Hasta el momento, los pesquisas se inclinan por la posibilidad de que ambos fallecieron por intoxicación por monóxido de carbono, ya que no había señales de violencia dentro de la vivienda. Las víctimas fueron identificadas como Gianfranco Segovia, de 28 años de edad, y Fiama Schneider, de 25. Los dos eran oriundos de Entre Ríos y estaban estudiando derecho en la Universidad del Litoral.
El hecho tuvo lugar este fin de semana cuando vecinos del edificio ubicado en calle San Martín al 1800, en la ciudad de Santa Fe, alertaron a la Policía que no se podían contactar con los estudiantes. Cuando los oficiales llegaron al inmueble hallaron a los dos jóvenes desvanecidos dentro del departamento del tercer piso.
El cuerpo de Segovia fue encontrado dentro de la bañadera, mientras que su compañera estaba en uno de los dormitorios. Todavía resta saber el resultado de las autopsias, pero los investigadores creen que hubo una fuga de gas y murieron producto de una intoxicación por monóxido de carbono.
El monóxido de carbono (CO) es un gas tóxico que se genera en situaciones donde los combustibles no se queman completamente. En invierno, muchas familias cuentan con estufas a gas para calefaccionarse que pueden provocar la expulsión del monóxido de carbono, lo que afecta la salud y provoca la intoxicación de las personas que se encuentran cerca del lugar.
Esta hipótesis se basa que en el lugar no se hallaron signos de robo o posibles muertes violentas. Aun así, continúa la investigación para constatar cuáles fueron las causas.
“La facultad lamenta con profundo dolor el fallecimiento de Gianfranco Segovia y Fiama Marianela Schneider, estudiantes de la carrera de Abogacía de nuestra casa. Toda la comunidad universitaria acompaña a sus familiares y amigos en este triste momento”, expresaron las autoridades de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad Nacional del Litoral a la que ambos asistían.
Cómo prevenir una intoxicación con monóxido de carbonoEn esta época del año es común que se den casos de intoxicación por monóxido de carbono (CO), una condición peligrosa que ocurre cuando se inhala una cantidad excesiva de este gas incoloro, inodoro e insípido, que se produce por la combustión incompleta de combustibles fósiles como el carbón, la madera, el petróleo o la gasolina.
El envenenamiento a causa de este gas está estrechamente relacionado con las bajas temperaturas debido al mayor uso de sistemas de calefacción y la combustión en ambientes cerrados para mantener el calor.
Los síntomas que puede sufrir una persona por intoxicación con este gas dependerá del nivel y la duración de la exposición, pero generalmente incluyen:
Dolor de cabezaMareosDebilidadNáuseasVómitosDolor en el pechoConfusiónPérdida de concienciaEn casos severos, la intoxicación por monóxido de carbono (CO) puede ser fatal debido a la naturaleza tóxica del gas. Cuando se inhala, el CO se une a la hemoglobina en la sangre con una afinidad mucho mayor que el oxígeno, formando carboxihemoglobina. Esto impide que la sangre transporte oxígeno adecuadamente a los órganos y tejidos del cuerpo, lo que puede llevar a una falta de oxígeno (hipoxia) en células vitales.
La hipoxia severa puede causar daños significativos en el cerebro y en el corazón, especialmente sensibles a la falta de oxígeno. Sin una intervención rápida y adecuada, estos daños pueden resultar en la falla de órganos vitales, pérdida de conciencia, coma y, finalmente, la muerte. La rapidez con la que se manifiestan estos efectos depende de la concentración de CO inhalada y la duración de la exposición.
Para prevenir la intoxicación por monóxido de carbono es fundamental instalar detectores de CO en el hogar, especialmente cerca de los dormitorios y en cada nivel de la casa. Estos detectores deben revisarse regularmente, cambiar sus baterías dos veces al año y reemplazarse según las indicaciones del fabricante, generalmente cada 5-7 años. Realizar pruebas periódicas garantiza su funcionamiento adecuado.
Además, los aparatos que queman combustibles, como calentadores, estufas y chimeneas, deben ser inspeccionados y mantenidos anualmente por profesionales calificados. Nunca se deben usar generadores portátiles, parrillas de carbón ni estufas de camping dentro del hogar, garage o en áreas cerradas, ya que están diseñados para uso externo. La ventilación adecuada es crucial para la evacuación segura del monóxido.