Florida ha sido testigo de un caso que ha captado la atención nacional. En las últimas horas, Wade Wilson, conocido como “el asesino de Deadpool”, fue sentenciado a pena de muerte por los brutales crímenes de dos mujeres en 2019. Este veredicto se produjo gracias a una controversial ley promovida en 2023 por el gobernador Ron DeSantis.

Wilson, apodado el “asesino de Deadpool” por compartir nombre con el famoso personaje de Marvel, recibió la dura condena tras ser declarado culpable de asesinar a Kristine Melton y Diane Ruiz, según informó la oficina del fiscal del estado. Los crímenes, descritos por el juez Nicholas Thompson como “atroces y crueles”, han sido considerados por muchos como un reflejo de la violencia sin control que se ha apoderado de algunas regiones de Florida.

Los asesinatos ocurrieron el 7 de octubre de 2019 en Cape Coral, Florida. El día anterior, Wilson conoció a Melton en un bar y terminaron durmiendo juntos hasta que él la estranguló. Acto seguido, le robó el automóvil y fue a visitar a Ruiz, que era su novia en ese momento. Una vez allí, la invitó a subir al vehículo, pero ella se negó y logró escapar. Momentos más tarde, la volvió a cruzar en otro sector y la engañó para que subiera al coche, donde la golpeó y estranguló, la empujó fuera y la atropelló repetidamente. Durante el juicio, el juez destacó que el segundo homicidio fue “fríamente calculado y premeditado”, lo que llevó al jurado a recomendar la pena de muerte por ambos crímenes.

La sentencia de Wilson no solo es significativa por la brutalidad de los crímenes, sino también por el marco legal en el que se dio. En 2023, DeSantis, gobernador de Florida, firmó una serie de leyes “contra el crimen”, una de las cuales reduce el número de votos necesarios en un jurado para imponer la pena de muerte. Bajo esta nueva legislación, solo se necesitan ocho votos de los 12 miembros del jurado para que se aplique la pena capital, en lugar de la unanimidad que se requería anteriormente.

Esta ley, que ha generado controversia y debate, fue utilizada en el juicio de Wilson. En el caso de la muerte de Ruiz, 10 de los 12 jurados votaron a favor de la pena de muerte, mientras que para el asesinato de Kristine Melton, fueron nueve los que apoyaron la sentencia máxima.

“El acusado pagará el precio más alto, la mayor pena que tiene el sistema de justicia penal, debido a las cosas inimaginables que hizo a estas dos víctimas. No ha pasado desapercibido que este acusado está siendo idolatrado por algunas personas que, de alguna manera, se enorgullecen de mezclar sus nombres con el suyo a través de comentarios públicos, recaudaciones de fondos para él o elevándolo como una especie de representación positiva de un hombre. Ignoran que no es más que un asesino despiadado y la representación más pobre de un hombre que podría existir”, señaló la Fiscal del Estado Amira Fox tras conocerse la sentencia.

Por último, completó: “Sus víctimas sufrieron físicamente de manera tremenda debido a su decisión de matar, debido a sus horribles acciones. Lucharon, pelearon por sus vidas. Este acusado no es un ídolo; no es más que un número en el Departamento de Correcciones de Florida, esperando la muerte”.

Durante el juicio, la defensa de Wilson intentó argumentar que el acusado sufría de una “mente enferma” debido a su adicción a las drogas, pero fueron desestimados tanto por el juez como por el jurado. A pesar de las apelaciones presentadas por la defensa, el juez Nicholas Thompson negó la solicitud de un nuevo juicio, lo que allanó el camino para la sentencia de muerte.