La aparición de planes de financiación más largos, la interoperabilidad de los pagos con QR y cierta estrategia de algunas familias para llegar a fin de mes pateando los pagos para el mes siguiente hicieron que el consumo con tarjetas de crédito creciera en el tercer trimestre del año, según un informe de la procesadora de pagos Payway, que mide el uso que hacen los argentinos de los medios electrónicos y digitales de pago.

De acuerdo con el último relevamiento que incluye lo sucedido en julio, agosto y septiembre pasados, si se mira el volumen total operado con tarjetas, las de crédito representaron un 58,17%, es decir que crecen en participación frente al trimestre anterior y frente a igual período del año pasado, mientras que las de débito decrecen levemente a un 41,06% y las prepagas suben a apenas un 0,77%.

En el análisis del consumo con tarjetas de crédito se visualiza que los planes de cuotas sostuvieron valores del trimestre anterior empujados por promociones de los emisores de tarjetas y la ampliación del Cuota Simple, cuyas versiones de 9 y 12 cuotas ganan participación dentro del programa.

En tanto, en el análisis por rubros, los que más crecieron en transacciones si se compara con lo sucedido en el segundo trimestre de este año son entretenimiento (12,10%), construcción (4,40%), restaurantes (3,12%) y hogar y electro (1,69%), aunque frente a igual período del año pasado solo entretenimiento está en terreno positivo (22,19%).

Indumentaria se mantuvo casi sin cambios (0,22%) respecto de abril, mayo y junio, y caen supermercados (-8,09%), estaciones de servicio (-6,46%) y farmacias (-1,04%). En la comparación interanual, en cambio, estos últimos tres rubros están en terreno positivo mientras que indumentaria no.

Consultado por LA NACION, Martín Kalos, de EPyCA Consultores, dijo que hay una gran disparidad a la hora de consumir. “Hay nichos con más poder adquisitivo que sí están pudiendo consumir algo más, y eso se observa en las ventas de algunos electrodomésticos específicos, como televisores, cámaras y todo lo ligado al entretenimiento. Por otro lado, también hay más consumo en los shoppings, cines, los jueguitos y los patios de comida. En definitiva, todo apunta a una fuerte heterogeneidad en los ingresos de las familias, y las pymes que orientan sus ventas mayormente a esos nichos de alto poder adquisitivo están capeando la crisis productiva de este año mejor que las que se vuelcan a un consumo más masivo, que sigue con ventas muy deprimidas”, explicó.

Más allá de esto, dijo que obviamente el peor momento del año se dio en el primer semestre y que en estos últimos meses se está viendo una leve mejoría tanto en las ventas de las pymes como en los ingresos de los hogares. Pero todavía estaríamos en lo que llama “un piso pegajoso”. “El sector mercado internista no tiene algo que traccione a que haya realmente una mayor demanda. Entonces tenemos un mes de mejora, un mes de amesetamiento, un mes de leve caída y así. Estamos en una especie de serrucho donde no se termina de despegar”, agregó.

En el mismo sentido, Ignacio Carballo, director del Centro de Finanzas Alternativas de la Universidad Católica Argentina, dijo que el comportamiento de los rubros se relaciona con la macro, que tocó un piso, y las lentas mejoras en las variables económicas que empiezan a aparecer.

En cuanto al resurgimiento de la tarjeta de crédito, Kalos dijo que tiene que ver con una mayor bancarización, con la interoperabilidad de los códigos QR y con cierto manejo de los ingresos frente a las crisis. “En los datos del Indec se ve que aumenta el uso de tarjetas de crédito, por ejemplo, para pagar en los supermercados, y Payway lo refleja obviamente de la misma manera con el aumento tanto de tarjetas de débito como de crédito por encima de las extracciones de efectivo. Todo esto habla de un cierto mayor endeudamiento de las familias justamente para llegar a fin de mes pateando los pagos para el mes que viene”, continuó.

Por otro lado, el análisis del comportamiento de las compras con tarjeta de débito en el tercer trimestre mostró un crecimiento interanual de 10 puntos porcentuales, lo que evidencia un incremento de los pagos electrónicos en detrimento del efectivo.

Con respecto al uso de QR Payway, el chief business officer (CBO) de la compañía, Emiliano Porciani, dijo en un comunicado que creció tres veces con respecto al año pasado impulsado por el crecimiento en todos los medios de pago, tarjetas de crédito, de débito y pagos con transferencias.

Por último, Porciani agregó que “en la adquirencia Payway los pagos con billeteras contactless crecen 27 veces respecto del año pasado”. “Gracias a la inversión de 60 millones de dólares en terminales inteligentes contactless, sumada a la renovación del parque de tarjetas con dicha tecnología coronada por la nueva normativa de la Secretaría de Comercio de la Nación, que entró en vigor en su totalidad el 12 de septiembre, hay un verdadero cambio de hábitos hacia los pagos sin contacto, el mecanismo más simple y rápido del mercado”, opinó.

A partir del 1° de diciembre próximo el subte se podrá abonar de esta forma, y según un estudio de Mastercard, por cada pago en transporte se hacen otros tres más con la tecnología NFC o sin contacto, con lo cual este sistema se estaría universalizando aún más en el país entre este año y el próximo.

El Índice Payway es un estudio de mercado de medios de pago que se fundamenta en datos estadísticos recopilados por la empresa a partir de diversos productos que gestiona. Estos incluyen la red de adquirencia (terminales POS, QR, sistemas propios, e-commerce, débitos automáticos, entre otros), retiros de efectivo y transacciones electrónicas para servicios e impuestos. Además, se pondera con información de mercado y estadísticas proporcionadas por el Instituto Nacional de Estadística y Censos de la República Argentina y el Banco Central.