Congelar el pan: un hábito saludable para tu microbiota y un gran aliado de la sostenibilidad
La congelación de alimentos es una práctica común en los hogares que no solo prolonga la vida útil de los productos, sino que también mejora su seguridad alimentaria. Por ejemplo, en el caso d...
La congelación de alimentos es una práctica común en los hogares que no solo prolonga la vida útil de los productos, sino que también mejora su seguridad alimentaria. Por ejemplo, en el caso del pescado, el frío elimina parásitos como el anisakis, mientras que en frutas y verduras ayuda a preservar sus nutrientes por más tiempo.
Sin embargo, más allá de la conservación, congelar ciertos alimentos puede aportar beneficios adicionales para la salud. Así ocurre con el pan, un alimento básico cuya congelación genera un impacto positivo en la microbiota intestinal, según la nutricionista y divulgadora Beatriz González.
El secreto está en el almidónLa harina de trigo, principal ingrediente del pan, contiene más del 80% de almidón. Al congelarlo, este componente pasa por un proceso conocido como retrogradación, lo que modifica su estructura y lo convierte en almidón resistente. Este tipo de almidón actúa como una fibra que no puede ser completamente absorbida en el intestino delgado.
El almidón resistente llega al colon, donde alimenta a las bacterias beneficiosas del intestino. Este proceso genera butirato, un ácido graso con propiedades antiinflamatorias que contribuye al bienestar intestinal y al fortalecimiento de la microbiota, clave para la salud digestiva.
Beneficios que van más allá del intestinoAdemás de favorecer la salud intestinal, congelar el pan ayuda a reducir el desperdicio alimentario. Al descongelarlo según las necesidades, se evita que el pan se endurezca o se eche a perder, permitiendo aprovecharlo por completo. En un contexto donde el desperdicio de alimentos es un problema global, esta práctica se convierte en una estrategia eficaz y sostenible.
Elegir mejor: pan integral y combinaciones saludablesPara maximizar los beneficios, la especialista recomienda optar por pan integral debido a su mayor contenido de fibra. Además, sugiere acompañarlo con alimentos nutritivos como palta, aceite de oliva, tomate o hummus, logrando una combinación saludable y deliciosa.
Adoptar el hábito de congelar el pan no solo beneficia a nuestra salud, sino que también contribuye a una mejor gestión de los recursos en el hogar. Una acción sencilla que puede marcar la diferencia para el organismo y el medioambiente.