Una “ley Bases bis” y citas con gobernadores: los próximos pasos del Gobierno antes del “Pacto de Mayo”
El “master plan” que anunció Javier Milei en el Congreso para comprometer al resto de la política con sus reformas se viene craneando desde que fracasó la vía del “todo o nada” con la l...
El “master plan” que anunció Javier Milei en el Congreso para comprometer al resto de la política con sus reformas se viene craneando desde que fracasó la vía del “todo o nada” con la ley Bases de 664 artículos. Algunos libertarios, fascinados con su líder, el viernes decían que “todo estuvo pensado desde el principio” porque fue necesario que Milei le mostrara el látigo a las provincias para llevar a los gobernadores hasta este lugar. En las provincias dicen que fue necesario que los gobernadores se mostraran abroquelados -como pasó con el episodio de Chubut- para que el Gobierno habilitara la vía del acuerdo.
Como sea, el camino hacia el “Pacto del 25 de Mayo” tiene ahora varias etapas a superar que incluyen una “ley Bases bis” y un intercambio con cada mandatario provincial para darle forma al pacto fiscal. El “preacuerdo”, en palabras de Milei.
Según pudo reconstruir LA NACION de altas fuentes oficiales, la nueva ley Bases que Milei quiere aprobar en las próximas semanas será más acotada que la original. En la Casa Rosada todavía están puliendo los artículos, pero en la mesa chica presidencial se habla de cuatro capítulos: las facultades delegadas al Poder Ejecutivo (allí también se incluirían las privatizaciones y la reorganización administrativa del Estado); las desregulaciones económicas (principalmente el capítulo hidrocarburos), el Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones (RIGI) y la nueva fórmula jubilatoria (que implicaría una actualización por inflación desde la sanción de la ley).
El capítulo retenciones no figurará en un gesto para dos gobernadores de peso, como Martín Llaryora (Córdoba) y Maximiliano Pullaro (Santa Fe). Todo este contenido se terminará de ajustar en la “mesa técnica” de la Casa Rosada, donde confluyen el vicejefe de Gabinete, José Rolandi; el secretario de Legal y Técnica, Javier Herrera Bravo; el asesor Santiago Caputo y los equipos de Federico Sturzenegger.
Lo que quieren cerca de Milei es que todos estos puntos estén incluidos en un solo proyecto. “Y se va a votar a libro cerrado, obviamente”, apuntan, para no exhibir ningún signo de debilidad ni ánimo de transacción. Después de varios días de deliberación interna sobre la estrategia legislativa a seguir, finalmente primó la idea de hacer un nuevo ómnibus en lugar de varias leyes puntuales. Se verá si esta idea puede prosperar en el Congreso.
La segunda parte del “preacuerdo” hacia la cita de mayo en Córdoba es la del nuevo pacto fiscal. Entre los gobernadores circuló extraoficialmente que podría haber una convocatoria a los 24 mandatarios el lunes 11 de marzo. Sin embargo, cerca de Milei dicen que el método de negociación no está definido. Algunos laderos del Presidente creen que sería más efectivo convocar a los gobernadores de a uno.
Pese a que Milei evitó en su discurso exhibir un perfil “acuerdista”, la novedad de las últimas horas es que la Casa Rosada cambió los términos del ofrecimiento. Si hasta acá la propuesta era “primero la ley y después los fondos”, ahora el jefe de Estado invita a tratar la ley ómnibus y el pacto fiscal en una operación simultánea.
Los gobernadores comenzaron a advertir que los dos fondos que retiró la Nación (el del transporte y el docente) y la situación de las cajas previsionales deberán estar en la ecuación, además de la merma en la coparticipación por el impuesto a las Ganancias.
Puentes subterráneosSi la nueva ley Bases y el paquete fiscal ven la luz, comenzará otra película para darle forma al “pacto” de Córdoba. Milei fijó diez puntos y dio a entender que su contenido se puede corregir. Cerca suyo aseguran que el espíritu del acuerdo no será materia de negociación. Si la cita de mayo prospera, el Gobierno enviará al Congreso otra serie de reformas, como la laboral, la política y la previsional.
El “brazo político” de Milei se movió en los últimos días para preparar el terreno para el anuncio del “Pacto de Mayo”. Un hito clave fue el viaje del ministro del Interior, Guillermo Francos, a Salta, donde mantuvo un encuentro con el gobernador anfitrión, Gustavo Sáenz, y otros cuatro mandatarios Hugo Passalacqua (Misiones), Osvaldo Jaldo (Tucumán), Raúl Jalil (Catamarca) y Carlos Sadir (Jujuy). Allí, el ministro comenzó a deslizar la idea de un pacto más grande.
Actores como el propio Francos; el viceministro del Interior, Lisandro Catalán; el subsecretario de Gestión Institucional, Eduardo “Lule” Menem y Santiago Caputo, venían haciendo un “poroteo” de los gobernadores que estaban dispuestos a responder a un llamado nacional como el que finalmente hizo Milei.
El caso Chubut que aglutinó a casi todos los gobernadores detrás de Ignacio Torres, hizo tambalear todos los puentes justo una semana antes de la apertura de sesiones ordinarias. Promediando esta semana, el conflicto se enfrió y Francos recibió a uno de los patagónicos, Alberto Weretilneck (Río Negro).
Con su jugada, Milei también logró encolumnar a Llaryora, con quien se había sacado chispas. El Presidente eligió a la capital cordobesa para su “pacto refundacional”. Cuando lo anunció, la transmisión del acto enfocó al gobernador de Córdoba con un primer plano. El mandatario, que no sabía nada, asintió con la cabeza.