La multinacional de origen francés L’Oréal designó un nuevo gerente general para la Argentina. No obstante, a pesar del cambio, la decisión de la corporación le da continuidad a un linaje de ejecutivos con el sello europeo. El elegido para asumir la responsabilidad fue Yann Le Bourdon, quien desde hace cinco años llevaba el escritorio principal de la compañía en Chile.

Durante su gestión en el país trasandino, el ejecutivo se puso al frente del proceso de transformación digital de la filial, aggiornó el modelo de negocio y estableció los fundamentos para garantizar el crecimiento del comercio electrónico. Así, en un entorno en el que las participaciones de mercado ya eran elevadas, impulsó igualmente el volumen de negocios, de acuerdo con datos de la compañía.

De cara a su desembarco en la Argentina, Le Bourdon aseguró: “Estoy muy emocionado de poder liderar a este equipo de profesionales tan talentosos y estoy convencido del potencial que nuestras marcas tienen para todas las personas que consumen nuestros productos”.

Asimismo, el ejecutivo anticipó a LA NACION la expansión de la producción local en la categoría de cuidado de la piel, que empieza con el sérum Revitalift Ácido Hialurónico, a fin de atender las demandas del mercado. La decisión responde a una estrategia adoptada por la compañía una década atrás que le permitió, mediante esfuerzos de nacionalización y localización, que el volumen de producción crezca del 0% al 70% .

Graduado en Negocios Internacionales en la escuela de negocios CESEM (Centre d’Etudes Européennes du Management) en Francia y ESB (European Business School) de Alemania, Le Bourdon inició su carrera en L’Oréal en 1990 en la división de marcas de lujo en Francia. Posteriormente, y a lo largo de 30 años, asumió diferentes posiciones en Alemania y en España, a la vez que ejerció como presidente de la firma en Corea.

Le Bourdon llegó a la Argentina para tomar la posta de Jean-Noël Divet. Se trata de un ejecutivo con más de 38 años de carrera en la compañía, quien ahora se retira por motivos de jubilación.

A lo largo de este ciclo, Divet se sentó en el escritorio de gerente general de L’Oréal para diferentes mercados, tanto en Europa -en Portugal y en Polonia- como en América Latina -en México y en Brasil-, hasta que en 2020 arribó a la Argentina. Desde entonces, Divet le hizo frente a una multiplicidad de desafíos, que incluyó desde la crisis derivada de la pandemia hasta las restricciones a las importaciones, la creciente inflación y la caída generalizada del consumo.

“Como en todas las crisis que L’Oréal atravesó en todo el mundo, las categorías de belleza que vendemos se defienden más que bien. Este fenómeno también sucede en la Argentina, hoy el consumo se mantiene estable, sólido, a pesar de que en otro contexto económico tal vez estaríamos mejor”, aseguró a LA NACION en 2023, en el marco del 60 aniversario de la empresa en el país.

Si Divet tenía un desafío por delante, cuando arribó a la Argentina en plena cuarentena, Le Bourdon no se queda atrás. El ejecutivo llega en un momento de reconfiguración del mercado. Es que, a la par de una incógnita que se presenta en torno de la macroeconomía, distintas compañías de la industria fueron también moviendo sus fichas en distintas direcciones.

El mayor movimiento fue dado en estos días por la norteamericana Procter & Gamble (P&G), que concretó su salida del mercado argentino. La multinacional cerró un acuerdo con el grupo local Newsan, a través del cual la empresa liderada por Rubén Cherñajovsky pasará a controlar la planta que tiene en San Luis y un portafolio de marcas líderes que incluye a Gillette, Pampers, Always y Pantene. Meses atrás, ya le había dejado su marca de jabón para la ropa Ariel y la de detergente Magistral, junto a la planta ubicada en Pilar, a la firma local Dreamco -surgida tras la salida de la peruana Alicorp y dueña de Plusbelle y Zorro-.

Asimismo, en mayo, la alemana Beiersdorf también hizo un enroque en su estructura. La firma dueña de las marcas Nivea, Curitas y Eucerin designó a Santiago Abella como nuevo CEO local, en reemplazo de Iván Espósito. “Estamos migrando de un modelo altamente restrictivo a otro mucho más libre y equilibrado por la competencia y la oferta y la demanda. En el corto plazo, el consumo se verá muy afectado, pero creo que se dieron pasos necesarios. Ahora todos los actores de la industria estamos preparados para crecer y volver a competir con recursos más genuinos, como la innovación, la comunicación y promoción al consumidor, la relación estratégica con los clientes y la ejecución en cada punto de venta”, aseguró Abella a LA NACION en ese entonces.

Y previamente, en el arranque de este año, también Kenvue eligió a un responsable de la plaza local. La compañía, nacida de un spin off de la norteamericana Johnson & Johnson, nombró a Martín Faes para este rol, para enfocarse en el fortalecimiento de marcas clave, como las cremas Neutrogena, los enjuagues bucales Listerine, las líneas de cuidado del bebé Johnson’s y los protectores diarios Carefree.

En este contexto, L’Oréal participa en la Argentina con una cartera conformada por 19 marcas, organizadas en cuatro divisiones: Professional, Dermatological beauty, Consumo masivo y Lujo. Y si bien su presencia data oficialmente de hace 60 años, la fecha se extiende más de 80 si se considera la llegada del primer producto de Lancôme. En 2023, la compañía reportó ventas por US$44.210 millones a nivel global, lo que se tradujo en un crecimiento de 11%. Y por su volumen de ventas, la Argentina se posicionó entre los principales 20 mercados del mundo y como uno de los tres mercados más importantes en América Latina, junto con Brasil y con México.