En las recientes elecciones del 5 de noviembre, los votantes de California dieron luz verde a la Proposición 35, una medida que establece un impuesto permanente a las organizaciones de atención administrada (MCO, por sus siglas en inglés). El objetivo principal es garantizar el financiamiento sostenible de Medi-Cal, el programa de atención médica pública para personas de bajos ingresos en el estado.

De acuerdo al texto oficial de la Proposición 35, esta normativa modifica la estructura del impuesto que era temporal y se renovaba por la Legislatura cada ciertos años. Ahora, con el 68% del apoyo de quienes se presentaron en los comicios, esta resolución garantiza la aplicación indefinida a partir de 2027, sujeto a la autorización federal.

Este impuesto se calcula en función del número de personas cubiertas por los planes de salud administrados, incluidos aquellos inscritos en Medi-Cal. La medida tiene como objetivo captar fondos adicionales que permitan aumentar la cobertura y mejorar los servicios ofrecidos a la población vulnerable de California. Según el análisis del texto de la medida, “la tasa de impuestos es mayor para aquellos inscritos en Medi-Cal en comparación con otros tipos de cobertura de salud”.

Orígenes de este impuesto a las organizaciones de atención administrada en California

El impuesto a las organizaciones de atención administrada no es una idea nueva en California. Desde 2009, el estado ha implementado diversas versiones de este gravamen con la finalidad de obtener recursos para financiar programas de salud.

El propósito central de esta política ha sido doble: en primer lugar, cubrir costos existentes en Medi-Cal, lo que reduce la necesidad de utilizar recursos del Fondo General del estado. Por otro lado, proporcionar financiamiento adicional para incrementar el acceso y la calidad de los servicios médicos. Al hacerlo permanente, la Proposición 35 busca establecer una fuente constante de ingresos que garantice la continuidad y expansión del programa.

El impacto financiero de la Proposición 35 y la distribución de los fondos

De acuerdo con la Proposición 35, el estado de California espera recaudar entre 7000 millones y 8000 millones de dólares anuales a través de este impuesto. La propuesta señala que, a partir de 2025, los ingresos aumentarán el financiamiento para diversos servicios de salud que incluyen clínicas de seguridad, transporte médico de emergencia, planificación familiar, salud reproductiva y programas de capacitación de la fuerza laboral de Medi-Cal.

Sin embargo, recién a partir de 2027, con la entrada en vigor del nuevo esquema permanente, se estima que ese incremento de fondos para programas de salud variará entre US$2000 millones y US$5000 millones anuales. La mitad de estos fondos provendrán de la nueva imposición, mientras que el resto se espera que provenga de fondos federales.

La lucha de los inmigrantes por acceder a Medi-Cal

Desde el 1° de enero de 2024, los adultos de 26 a 49 años califican para Medi-Cal completo, independientemente de su estatus migratorio. El Departamento de Cuidado y Servicios de Salud de California (DHCS, por sus siglas en inglés) advirtió en un comunicado que seguirán con la aplicación de todas las demás reglas de elegibilidad del programa, incluidos los límites de ingresos.

A pesar de esa apertura, diferentes organizaciones proinmigrantes denunciaron que el acceso a esa posibilidad no es igual para todos. “La cobertura no significa necesariamente acceso. Existe una escasez de profesionales de salud. Todos estamos luchando por recibir atención médica. Estamos compitiendo entre nosotros para conseguir que los médicos nos atiendan”, indicó meses atrás Isabel Becerra, consejera delegada y presidenta de la Coalición de Centros de Salud Comunitarios del Condado de Orange, durante una cumbre sobre política sanitaria llevada a cabo en Los Ángeles.