El incidente, que dejó atónitos a transeúntes y residentes, fue capturado en videos que rápidamente se volvieron virales en las redes sociales. En las imágenes, se puede observar a un caballo blanco, ensillado y aparentemente cubierto de sangre, corriendo descontroladamente por las calles, seguido de cerca por otro de pelaje oscuro.

Según informes del periódico Telegraph, los caballos pertenecían a la Caballería Real, una parte distinguida del ejército británico, y se habían soltado mientras realizaban ejercicios en Horse Guards Parade, un emblemático campo de desfiles ceremoniales en el corazón de la ciudad.

La Policía Metropolitana de Londres confirmó estar al tanto de la situación y declaró estar colaborando estrechamente con diversos organismos, incluido el ejército, para localizar y asegurar a los equinos fugitivos.

El Servicio de Ambulancia de Londres recibió una llamada de emergencia, alertando sobre una persona que había sido arrojada de un caballo en Buckingham Palace Road, una de las vías principales de la capital. Un portavoz del servicio indicó que el incidente aún estaba en curso y que se estaban coordinando esfuerzos con otros servicios de emergencia para gestionar la situación.

Por su parte, la policía de la Ciudad de Londres, la fuerza encargada del distrito financiero de la metrópolis, informó que habían logrado contener a dos de los caballos y estaban preparándose para trasladarlos a atención veterinaria para evaluar su estado de salud y seguridad.

En medio del desconcierto y la incertidumbre, las autoridades instaron a la población a mantener la calma y evitar aproximarse a los animales descontrolados por su propia seguridad.