Las automotrices se sumarán al RIGI: qué inversiones podrían atraer
Las terminales automotrices podrán adherir al RIGI (Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones) a través del sector de Tecnología y aguardan la letra chica de la reglamentación para ...
Las terminales automotrices podrán adherir al RIGI (Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones) a través del sector de Tecnología y aguardan la letra chica de la reglamentación para destrabar inversiones vinculadas con la hibridación y nuevas motorizaciones en el próximo año y medio.
Fuentes del sector aseguraron a LA NACION que el decreto reglamentario del RIGI que se conocerá en estos días incluirá la aclaración de que los proyectos vinculados con movilidad sustentable y nuevas tecnologías podrán aplicar al rubro Tecnología originalmente contemplado en la ley sancionada por el Congreso. Así, las automotrices estarán habilitadas a presentar proyectos de inversión por un mínimo de US$200 millones para acceder a los beneficios fiscales que otorga el régimen.
Sancionado dentro de la Ley Bases en el mes de junio, el RIGI otorga estabilidad fiscal por 30 años, rebajas impositivas y otros incentivos como la posibilidad de no liquidar divisas en el MULC (Mercado Único y Libre de Cambios) a los nuevos proyectos de inversión por el monto antes mencionado de sectores como Energía, Minería, Siderurgia, Industria forestal, Infraestructura, Turismo y Tecnología. La industria automotriz no fue contemplada entre esos sectores, pero aplicará a través de Tecnología.
“La inclusión de la movilidad sustentable en la reglamentación puede acelerar las inversiones en híbridos”, dicen en el sector, que está expectante de los próximos pasos normativos para apurar la gestión de nuevos desembolsos con las casas matrices.
Qué documentos se necesitan para transferir un auto usado y cuánto sale el trámite
Un punto importante luego de la publicación del decreto reglamentario general del RIGI, explican en las terminales, será la “letra chica” de la resolución reglamentaria que publique la Secretaría de Industria. Allí, dicen, se debería contemplar la manera de que las terminales puedan presentar nuevas inversiones que accedan a los beneficios impositivos con su actual sociedad que ya opera en la Argentina, sin constituir una específica para los nuevos proyectos, como establece el RIGI. “Hay que adaptar la resolución a la operación que tienen las compañías en el país, que usan un único CUIT para todas sus actividades”, indica un ejecutivo del sector.
Uno de los atractivos que tiene el RIGI, además de los beneficios impositivos, es que establece una ventana de dos años para ingresar y obliga a ejecutar el 40% de la inversión prevista en ese plazo, pero luego permite hacer una pausa de un año en el desembolso. Esa posibilidad es clave para agilizar decisiones de inversión en el sector automotor que vienen retrasadas por las condiciones que atravesó la economía argentina en los últimos años, confía un directivo.
En contraste con la situación local, Brasil capturó en los últimos meses anuncios de inversión en nuevos modelos por US$20.000 millones, a partir del plan MoVer, que promueve la movilidad híbrida y eléctrica y la expansión en el uso de biocombustibles. Con el ingreso al RIGI, las terminales locales buscan no quedar afuera de la nueva ola inversora ligada con el cambio tecnológico que vive el sector.
Si la reglamentación sale en los términos previstos, en el próximo año y medio habrá varios anuncios vinculados con renovación de modelos y radicación de nuevas plataformas en la Argentina, confían en las terminales. “ acelerará decisiones y permitirá destrabar proyectos, justo en el momento en que por renovación generacional le toca recibir inversiones a la industria”, dice un ejecutivo.
De los anuncios de inversión que podrían llegar, el primero –que se concretaría antes de fin de año- es la radicación de una nueva plataforma en la planta de Renault en Córdoba para fabricar una pick up compacta, sucesora de la actual Oroch. El desembolso está confirmado y resta conocer el monto y las características técnicas de la plataforma (sería la misma del nuevo SUV Kardian hecho en Brasil) que llegará a la planta de Santa Isabel.
El Grupo Stellantis (dueño de Fiat, Peugeot, Citroën y Jeep, entre otras marcas) también analiza una inversión para la planta de Fiat en Córdoba, donde produciría una nueva pick up mediana con distintas marcas, según las especulaciones que manejan en la industria. Y de cara al nuevo ciclo inversor que le cabe a la Argentina por renovación de productos, en el sector mencionan el caso de Toyota, que debe avanzar con la nueva generación de su pick up Hilux producida en la planta de Zárate. Todo indica que la futura pick up incluiría una opción híbrida en su gama.
Otras terminales como Ford –que desembolsó el año último US$660 millones para producir la nueva generación de la pick up Ranger-, Nissan e incluso Volkswagen podrían también sumar tecnología híbrida a su oferta actual o negociar desembolsos para las nuevas generaciones de las pick ups que contemplen esa alternativa. Con el incentivo del RIGI, concluyen en el sector, la negociación con casa matriz tiene otro color.