HOUSTON.- Como en toda ciudad enorme de los Estados Unidos (esta es la cuarta en importancia), cada paso que se da debe ser pensado en tiempo y forma. Las distancias son grandes y el calor demoledor modifica los cálculos. Pocos se atreven a caminar por la calle. El cemento magnifica los 44 grados de sensación térmica en la tierra que vio nacer a Kenny Rogers y Beyoncé. Bajo estas condiciones extremas la selección argentino desembarcó y generó una sensación entre los fanáticos que están interesados en el fútbol. Nuevo look, Lionel Messi como imán de todo y la expectativa latente de un encuentro particular entre dos estrellas del mundo del deporte cuando el conjunto campeón del mundo realice su primer ensayo en el Shell Energy Stadium, la casa de Houston Dynamo, equipo de la MLS.

Sobre la calle Old Main, donde está el hotel de la delegación argentina, todo está tranquilo, aunque siempre hay fanáticos que están expectantes ante los movimientos del plantel y en especial de su capitán, Lionel Messi. El rosarino es una pieza de colección vital para cada paso en la Copa América, y todos quieren un saludo, una imagen a lo lejos. Pero con las altas temperaturas, al igual que la mayoría de las sedes -excepto en Miami, donde tuvieron algún momento libre con familiares-, los futbolistas solo salen del hotel para ir al entrenamiento.

El lugar es el predio de Houston Dynamo, una de las franquicias de la MLS, que le cede su estadio al equipo de Lionel Scaloni para los ensayos previos al choque de este jueves ante Ecuador. Lo peculiar es que uno de los accionistas es una de las estrellas de la NBA, James Harden. La Barba, como se lo conoce a este personaje tan particular, es fanático del fútbol, y por eso buscó ampliar su abanico de inversiones siendo parte del directorio de Dynamo.

James Harden is in Miami rooting for the Houston Dynamo in the U.S. Open Final 👀

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Harden, que sigue de cerca cada movimiento del club y en su última temporada en la NBA cobró 33 millones de dólares -tiene un contrato por dos años más con Los Angeles Clippers por 70 millones-, agregó esta inversión a su cartera de proyectos, que incluyen la bebida deportiva BodyArmor, la marca de artículos de belleza Art of Sport (AOS), la empresa de medias Stance y su último emprendimiento de vinos. Según Front Office Sports, Harden adquirió el cinco por ciento del paquete accionario del club, que con este desembarco valora a la franquicia en más de 475 millones de dólares.

“Estoy muy emocionado por la oportunidad de unirme al grupo propietario del Houston Dynamo y Houston Dash (equipo femenino) y orgulloso de ser parte de un club con una tremenda historia y un gran futuro. Houston es mi casa y lo vi como una manera de invertir en mi ciudad y expandir mis intereses comerciales al mismo tiempo. El fútbol en general, y en especial la MLS, ha explotado. He sido fanático del juego durante varios años y sé que Houston tiene una enorme base de fanáticos del fútbol, por lo que fue una decisión fácil para mí cuando surgió esta oportunidad”, le dijo Harden al sitio oficial del Dynamo.

Houston Dynamo, desde su fundación, en diciembre de 2005, pisó con fuerza en la MLS. En su primera temporada, la 2005/06, terminó en la cuarta posición y después se coronó en dos oportunidades (2006 y 2007). También se quedaron con la US Open Cup en 2018. Al año siguiente, se sumó Harden al proyecto, ya que por entonces La Barba era la estrella de Houston Rockets, de la NBA.

En 2023, se lo pudo ver a Harden en el estadio cuando Dynamo superó a Inter Miami por 2-1 en la final de la US Open Cup, un encuentro que Lionel Messi no pudo jugar por estar lesionado.

Harden, de 34 años, se sumó al directorio que encabeza el presidente y accionista mayoritario, Ted Segal, y su vicepresidente, Lyle Ayes. “La MLS está creciendo con Messi. Es algo grande porque en Estados Unidos nunca hemos tenido reconocimiento para los futbolistas. Veremos cómo se desarrollan los jugadores jóvenes y será bueno para la cultura del fútbol estadounidense”, le dijo Harden a USA Today.

No sólo Harden es parte del mundo del fútbol, sino que otras estrellas de la NBA dieron un paso en ese sentido. El griego de Milwaukee Bucks, Giannis Antetokounmpo, invirtió en el Nashville SC, junto con sus hermanos Thanasis y Kostas. Kevin Durant también posee una participación minoritaria en el Philadelphia Union desde 2020. Además, Durant utiliza su fundación benéfica (KDCF) para trabajar con las comunidades locales y apoyar programas sociales relacionados con el fútbol.

Además, Magic Johnson, el legendario base de los Los Angeles Lakers es uno de los socios fundadores del LAFC, uno de los dos equipos angelinos que compiten en la MLS desde 2018. Johnson forma parte del grupo liderado por el empresario Peter Guber, que también posee los Golden State Warriors y los Los Angeles Dodgers. Y uno que invirtió, pero fuera de los Estados Unidos, fue LeBron James, que fue uno de los primeros en esta tendencia, ya que en 2011 compró el 2% de las acciones del Liverpool de Inglaterra y su inversión ha multiplicado por cinco su valor original.

El mundo del básquetbol y el fútbol se entrelazan. Una constelación de estrellas sobrevuela en este ciudad. La casa de La Barba recibirá al campeón del mundo y Lionel Messi le dará un motivo más a Houston Dynamo para potenciar su marca en los Estados Unidos.