Diego Schwartzman se encuentra de viaje por los Estados Unidos y coincidió en su camino con David Beckham, el exjugador de la selección de Inglaterra y accionista del club Inter Miami, donde se desempeña futbolísticamente Lionel Messi.

Con una vinculación directa y fuerte con el deporte, Beckham desafío a Schwartzman a jugar un partido de pádel, deporte de moda en Miami que hasta el propio Messi se animó a jugar. Tras finalizar el encuentro, el empresario subió a su cuenta de Instagram una historia junto a su hijo Romeo y el Peque donde aclaró que él ganó. “Dad won”, aseguró el inglés en una frase que, traducida al castellano, significa “ganó papá”.

Vestido con una musculosa de color verde y una gorra blanca, David posó para la cámara junto al Peque, que optó por tener el torso desnudo tras disputar el encuentro bajo las altas temperaturas de los Estados Unidos. “Un divertido partido de pádel”, agregó Beckham en la publicación para quitarle el espíritu deportivo y relajar las tensiones. Aunque también cruzó las banderas de la Argentina y de Inglaterra, y volvió a aclarar quién resultó ganador: “Inglaterra ganó, perdón chicos”.

Sin embargo, el Peque Schwartzman no se quedó atrás y republicó esa misma imagen con una frase contundente: “La revancha será pronto”.

Este no fue el único partido que disputaron ambas celebridades del deporte. El lunes, en el club “Reserve Paddle” tanto Beckham como Schwartzman se enfrentaron en un partido de dobles donde el tenista argentino hizo pareja con el hijo del exjugador del Real Madrid.

Motivado por esta nueva faceta que empieza a desplazar al tenis, un deporte del cual ya oficializó que se retirará el próximo año, el argentino empezó a preparar el día después y fortaleció la relación con Beckham, quien está inmerso en el mundo del fútbol y del pádel para mantener su forma física.

Ubicado en el puesto 230° del ranking de la ATP, el argentino de 31 años viene arrastrando un perfomance para el olvido durante este año. Con un rendimiento lejos del esperado, el Peque meditó el hecho de ponerle un punto final a su carrera, que tuvo su pico más alto en el 2020 cuando llegó al top 10.

Tras verse sin respuestas adentro de una cancha, Schwartzman empezó a buscar un camino alternativo dentro del deporte, a pesar de todavía seguir activo en el circuito hasta el próximo año, cuando se estima que en el mes de febrero jugará sus últimos partidos en el ATP de Buenos Aires.

“En mi interior, un animal competitivo me impide disfrutar, jugar y viajar como solía hacerlo. Quiero que mis últimos torneos sean una decisión propia. Que este 2024 sea de esa manera, ojalá teniendo la oportunidad de competir en los torneos que más disfruto. Y en 2025, en Argentina, poder tener mi momento final, el más hermoso cierre que pueda imaginar”, aseguró en una sentida carta de despedida que publicó en Instagram.

A la espera de cómo seguirá su carrera profesional en la segunda mitad del año, el Peque ya dejó en claro que sus prioridades lo mantienen ocupado lejos de una cancha de tenis, aunque la preparación física y el deporte seguirán estando presente para mantenerse activo. Con una gran oportunidad de meterse en el mundo del pádel, como así lo hicieron otros deportistas argentinos como Gonzalo Higuaín, el tenista comienza a cerrar una etapa y a transitar otra diferente.