Gregg Popovich, el legendario entrenador de San Antonio Spurs, ha estado alejado del banco debido a que sufrió un leve derrame cerebral a principios de este mes, informó el miércoles la franquicia texana de NBA. El miembro del Salón de la Fama del básquetbol cumple su temporada 29 como entrenador del equipo blanco y negro. La organización no detalló una fecha de regreso a la actividad, pero sí se difundió que el derrame ocurrió el 2 de noviembre en el estadio, y se espera que Popovich se recupere completamente.

El preparador, de 75 años y ganador de cinco campeonatos, incluidos cuatro con el argentino Emanuel Ginóbili en el plantel, ya ha comenzado un programa de rehabilitación, según Spurs. “Durante este tiempo, la organización está agradecida a la comunidad extendida por proporcionar privacidad y espacio a la familia Popovich”, dijeron en un comunicado.

Popovich es el líder histórico de victorias en la liga de Estados Unidos y además llevó al seleccionado de su país a la conquista de la medalla dorada en los Juegos Olímpicos Tokio 2020. En ausencia de él, su asistente Mitch Johnson ha sido el entrenador interino del conjunto, papel que desempeñó por séptimo partido seguido este miércoles, como local frente a Washington Wizards. “Mitch ha estado excelente”, dijo el jugador Stephon Castle este miércoles sobre el asistente, antes de que la franquicia anunciara el estado de salud de Popovich. “Incluso cuando Pop estaba aquí, siempre ha tenido voz durante las pausas y en nuestro vestuario. Nuestra filosofía no han cambiado”, elogió el novato.

Un derrame cerebral ocurre cuando el flujo sanguíneo a una parte del cerebro está bloqueado o si un vaso sanguíneo en el cerebro se rompe. Eso priva de oxígeno al cerebro, lo que puede causar daño cerebral que puede derivar en dificultades para pensar, hablar y caminar, e incluso la muerte. Los derrames pueden a su vez causar parálisis en ciertos músculos, pérdida de memoria y otros problemas. Se desconoce si Popovich está lidiando con algún efecto secundario. Sí se sabe, en cambio, que los derrames cerebrales fueron la cuarta causa de muerte en Estados Unidos en 2023, según el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades, y más de medio millón de habitantes sufre un derrame cada año.

San Antonio recibió a Minnesota Timberwolves el 2 de noviembre. El episodio médico de Popovich ocurrió unas horas antes. Johnson dirigió esa noche, que terminó en una victoria (113-103), luego de que la organización esgrimiera que Pop no se había sentido bien.

El septuagenario preparador es uno de los tres que han ganado tres veces el premio al Entrenador del Año en la NBA; Don Nelson y Pat Riley son los otros. Es uno de los cinco que poseen al menos cinco anillos de campeón, como Phil Jackson (11), Red Auerbach (9), John Kundla (5) y Riley (5).

Popovich ha sido parte de Spurs durante casi 35 años. Fue entrenador asistente desde 1988 hasta 1992, y regresó al club el 31 de mayo de 1994 como vicepresidente ejecutivo de operaciones de básquetbol y gerente general. Despidió a Bob Hill y se nombró entrenador el 10 de diciembre de 1996. Desde entonces es el líder del banco.

Los 29 años de Popovich en San Antonio constituyen una etapa de longevidad inusual en el deporte profesional de Estados Unidos. Connie Mack dirigió 50 años a Philadelphia Athletics en béisbol; George Halas entrenó a Chicago Bears en la NFL durante 40, y John McGraw preparó a New York Giants, también en fútbol americano, a lo largo de 31. Esas tres etapas, concluidas hace más de medio siglo, son las únicas que superan la carrera de Popovich en Spurs. Su era de 29 años iguala los ciclos de Tom Landry en Dallas Cowboys (NFL) y Curly Lambeau en Green Bay Packers (NFL).