Fármacos, visitas a la guardia y tratamiento psiquiátrico: la asistencia que demandó Fabiola Yañez en España
La declaración de Fabiola Yañez de este martes, y nuevos hechos incorporados a la causa delinean una historia clínica complicada durante años, y especialmente en los últimos meses, producto de...
La declaración de Fabiola Yañez de este martes, y nuevos hechos incorporados a la causa delinean una historia clínica complicada durante años, y especialmente en los últimos meses, producto de la violencia denunciada por la ex primera dama. Alcoholismo y tratamiento psiquiátrico, entre las secuelas a las que apuntó. Así lo refleja un documento oficial, emitido por el Hospital Universitario, en Madrid, que da cuenta de un cuadro de crisis asmática. Yañez, además, indicó que ingería habitualmente por lo menos tres fármacos: sertalina, ribotril y loracepam, un antidepresivo, un sedante y un ansiolítico, respectivamente (entre las propiedades principales).
Incluso en España, alejada de Alberto Fernández, acudió por atención médica por una crisis de ansiedad múltiples veces. De acuerdo con fuentes de su entorno, cada vez que se mencionaba la emisión de un documental o libro de su autoría, el expresidente intensificaba el acoso y las amenazas y eso le provocaba problemas de presión y ansiedad.
Yañez narró, en el escrito, que el acoso “no paraba nunca”, que la llamaba a cualquier hora y se enojaba con su hijo Francisco (de 2 años), si no lo quería atender o si lo atendía y no le hablaba. “Ha comenzado a gritarle al niño en forma desaforada ´para qué me atendés si no me hablás´, y ante mi reproche de que por favor no lo maltrate, me dice que los gritos no son hacia nuestro hijo, sino que son para mí”.
En una ocasión, ingresó a una guardia antes de que el juez Julián Ercolini la contacte por las imágenes que encontraron el télefono de María Cantero, la secretaria privada y cerca de las fechas en las que Fernández estuvo en Madrid. Entró al Hospital Universitario el 7 de junio a las cuatro de la tarde. Reportó tener una cefalea hace cuatro días (dolor de cabeza), malestar general, decaimiento, labilidad emocional (cambios de humor repentinos) y disnea (dificultad para respirar).
Apuntó como causa “estrés personal asociado al acoso de la expareja”. En urgencias, le administraron 10 miligramos de valium (que se utiliza para ataques de ansiedad), un poco más de una hora antes de entrar.
Sobre la situación en España, añadió en su declaración escrita: “Un día me llamaron para decirme que se había muerto, y yo llamé al hermano desesperada para que vaya a verlo. Siempre lo protegí, porque sé que es el padre de mi hijo y porque es parte del daño psicológico que los golpes y el maltrato me produjeron: sentirme responsable y culpable de todo lo que pasa”.