Val Kilmer es uno de los más grandes actores que tiene Hollywood, y así lo demostró con sus papeles estelares en películas de renombre como Top Gun: pasión y gloria (1986), The Doors (1991) y Batman Forever (1995); sin embargo, una dura enfermedad lo llevó a alejarse de los sets de filmación, hasta que encontró la manera de regresar.

El actor de 64 años fue diagnosticado con cáncer de garganta y tuvo que someterse a varias traqueotomías, lo que afectó su voz. No obstante, en colaboración con la empresa Sonantic, logró crear una voz artificial que imita su tono original, por lo que pudo volver a comunicarse y retomar una de sus pasiones: la actuación. “Después de ser diagnosticado con cáncer de garganta, mi voz como la conocía me fue arrebatada (...) Pero después de todo, siempre sentí que era la misma persona. Ahora puedo expresarme de nuevo”, dijo al respecto.

En ese sentido, en 2022, Kilmer volvió a ponerse en la piel de Tom ‘Iceman’ Kazansky en la secuela de Top Gun, quien en esta oportunidad se encuentra en el rango más elevado de su profesión como militar. Sin embargo, su aparición en la producción es breve, ya que no tiene mucho diálogo y a la hora de comunicarse lo hace mediante textos en pantalla.

Aunque el intérprete de Doc Holliday en Tombstone (1993) se enteró de su enfermedad en 2014, prefirió ocultarla. Incluso, cuando el medio estadounidense People reveló que el actor tenía un aparente tumor en la garganta, lo negó rotundamente a través sus redes sociales. Hasta que seis años después decidió hacer pública su situación en su libro I’m Your Huckleberry (2020). “De repente me desperté vomitando sangre. Cubría la cama como en una escena de El Padrino”, expresó en esa oportunidad.

En otro fragmento se refirió a las personas que lo ayudaron a transitar la enfermedad, entre ellos, Cher, la cantante con quien en la década de los 80 vivió de manera intensa un vínculo que luego se transformó en una incondicional amistad. “Una vez que Cher se abre camino dentro de tu cabeza y tu corazón, ella nunca se va. Para sus verdaderos amigos, su firme amor y lealtad nunca mueren”, sostuvo.

Más tarde, dio una entrevista para el programa Good Morning America y comentó cómo se sintió luego de las dos intervenciones que lo dejaron sin habla: “Estoy genial, me siento mucho mejor de lo que sueño. Es como cualquier otro idioma o dialecto (...) Tenés que encontrar una forma de comunicarte que no es diferente a cualquier otro reto actoral, pero es un conjunto de circunstancias únicas”.

Mientras que en una entrevista subida a YouTube por la empresa Sonantic habló de las dificultades que tiene el resto para entenderlo: “Mi voz tal y como la conocía se fue lejos de mí. A la gente que está a mi alrededor le cuesta entenderme cuando estoy hablando”.

Asimismo, los expertos explicaron que necesitan un promedio de tres horas de audio antiguo para poder recrear una voz en 24 horas. Pero debido a las restricciones de Hollywood por derechos de autor, tuvieron que adaptarse a trabajar solo con 30 minutos de audio.

Cabe destacar que un año después de la publicación de sus memorias, Kilmer lanzó Val, un documental personal que explora su vida, sobre todo, su batalla contra el cáncer; este puede verse en Prime Video.