Envolver o no tu valija: un agente de seguridad de Estados Unidos explica si vale la pena el costo
Entre sus muchos servicios, los aeropuertos alrededor del globo ofrecen algo común para todos los pasajeros: la posibilidad de envolver sus valijas con un film reforzado para brindarle una “prot...
Entre sus muchos servicios, los aeropuertos alrededor del globo ofrecen algo común para todos los pasajeros: la posibilidad de envolver sus valijas con un film reforzado para brindarle una “protección adicional” a las pertenencias y así evitar robos y otras situaciones indeseadas. Por supuesto, esto tiene un costo extra que se suma a todos los previos a comenzar el viaje; actualmente, en la Argentina el precio ronda los $15.000 por cada bulto.
Muchos viajeros acostumbran hacer uso de este servicio, pero ¿es realmente útil o solo forma parte de una -muy exitosa- campaña de marketing? Saraiah Davis, gerente de seguridad del transporte, y Lorie Dankers, portavoz de la Administración de Seguridad del Transporte (TSA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos explicaron por qué no lo consideran tan necesario.
Las recomendaciones de la TSAEn general, las especialistas no recomemendaron envolver las valijas ya que no proporciona ningún beneficio que pueda justificar el costo adicional en el viaje. En este sentido, explicaron cuál es el recorrido que tiene que realizar el equipaje desde que se separa de su dueño en los aeropuertos de Estados Unidos.
En primer lugar, luego de registrar la maleta en el mostrador de una aerolínea, todos los objetos despachados pasan por un sistema especial de detección de explosivos. Este escáner 3D puede identificar una serie de productos que son considerados “potenciales explosivos”, y que le avisa a los efectivos de TSA en caso de necesitarse un control más exhaustivo. “Si la tecnología detecta la bolsa, la imagen de rayos X 3D se envía a un oficial de la TSA para que la revise. Los agentes de la TSA observan cientos de imágenes de rayos X para saber cómo se ven los elementos comunes en la pantalla de rayos X”, explicó Dankers.
Después de revisar la imagen, el oficial puede autorizarla y enviar la valija para que sea cargada en el avión, o bien marcarla para una inspección física, que es el caso de solo el 5% de las alertas. De esta forma, si se detecta una alerta los miembros de la agencia de gobierno deberán abrir la valija de cualquier forma, por lo que tendrán que romper el envoltorio que la rodea. Según agregaron, todas las salas de inspección de equipaje tienen cámaras de seguridad CCTV, por lo que se puede descartar cualquier tipo de robo.
“Cuando el equipaje envuelto se corta para su inspección, no se vuelve a envolver. El envoltorio se tirará o se pegará con cinta adhesiva, pero no será el mismo que era originalmente”, agregaron. En caso de que esto suceda -que, según Davis, suele ocurrir en vuelos internacionales- la TSA dejará una nota informando al pasajero sobre la inspección de su valija, y, en caso de que hayan tenido que romper la tela por no poder abrirla, se comunicará con la aerolínea para notificar al pasajero sobre dónde recuperarla.
Las especialistas recomendaron, en cambio, que todos los usuarios utilicen candados aprobados por la TSA. De esta forma, si es necesario abrir la valija, cualquier agente de control podrá hacerlo fácilmente y sin necesidad de forzar o romper los cierres o cualquier otro candado que tengan.