La frontera entre Texas y México es uno de los sitios por los que más migrantes ilegales ingresan a Estados Unidos. En ese contexto, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) decidió darle un nuevo propósito a su sistema de radares en globos aerostáticos. En específico, según aseguró un congresista, serán utilizados para detectar a los extranjeros que crucen sin permiso, así como también para evitar las muertes que ocurren en esa zona.

Cerca de El Paso: se reforzará la vigilancia en la frontera mediante globos aerostáticos

La CBP desplegará un dirigible de vigilancia de alta tecnología, que forma parte del Sistema de Radar Aerostático Atado (TARS, por sus siglas en inglés), en el puerto de entrada de Santa Teresa, Nuevo México, cerca de El Paso, Texas. El objetivo que tiene la medida es prevenir las muertes e ingresos ilegales de migrantes a lo largo de la frontera sur.

Esto fue confirmado por el congresista federal por el estado de Nuevo México, Gabe Vásquez. Según comentó, en lo que va del año fiscal 2024, esta zona se convirtió en un “corredor de la muerte”. Desde octubre de 2023 hasta ahora, casi 150 personas fallecieron en el desierto en el intento de ingresar sin permiso en Estados Unidos.

“Esta tecnología no solo está destinada a detener a las personas que cruzan la frontera ilegalmente, sino también a salvar vidas”, comentó Vásquez. A comienzos de agosto, el congresista compartió un video junto al senador Martin Heinrich, en el que recorrieron la frontera de Nuevo México y analizaron cómo funcionarán los globos aerostáticos. De no mediar inconvenientes, se desplegarían en septiembre de 2024.

De qué se trata el sistema de radar en globos aerostáticos

Por lo general, el Departamento de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos utiliza el Sistema de Radar Aerostático Atado para poder detectar a largo alcance las aeronaves de baja altura en el rango máximo del radar. “El sensor elevado mitiga la curvatura de la tierra y las limitaciones de enmascaramiento del terreno”, indican desde la CBP.

El TARS detecta y rastrea la mayoría del tráfico aéreo sospechoso a lo largo de la frontera suroeste, incluidas las amenazas de aeronaves ultralivianas y de aterrizaje corto. A su vez, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) requiere esta capacidad del radar en otras áreas, como el Golfo de México, las costas del Atlántico sur y del Pacífico y “regiones extendidas en todo el Caribe utilizadas por organizaciones criminales transnacionales para el contrabando ilícito de narcóticos y personas”, indicaron.

Existen dos tipos de aerostatos: el 275K y el 420K. En ambos casos, “el casco de estos contiene dos partes separadas por una partición de tela hermética al gas”. “La cámara superior está llena de helio y proporciona la capacidad de elevación, mientras que la cámara inferior del casco es un compartimento de aire presurizado”, puntualizaron desde la CBP.

“El sistema de aerostato consta de un globo lleno de helio, amarre fijo en el sitio y controles de sujeción, estaciones de comando y control, red de distribución de datos y vehículos e instalaciones de apoyo de mantenimiento”, completaron desde esa agencia. Además, detallaron que necesitan un mínimo de cinco operadores para lanzar y recuperar el TARS. Desde el año fiscal 2014 hasta el año fiscal 2020, fue responsable de detectar el 68% de todos los vuelos sospechosos de contrabando aéreo que se acercaban a la frontera suroeste desde México.