La salud mental y el bienestar emocional son dos conceptos que, hace 30 años, habrían sido completamente incomprendidos en el ámbito laboral. Sin embargo, en una era marcada por la pospandemia –y el cambio de mindset de las generaciones más jóvenes– se han convertido en una realidad inminente para la cultura organizacional. Hoy los talentos de las empresas priorizan más que nunca aquellos aspectos que colaboran con la mejora de su calidad de vida por encima de factores tradicionales como la estabilidad o el salario.

El relevamiento “Bienestar y salud emocional y mental en el trabajo post pandemia” realizado en conjunto por IDEA, INECO y PUNTUAL pone de manifiesto cómo los cambios culturales están redefiniendo las expectativas en el ámbito laboral, colocando el bienestar emocional y la salud como un eje central para la productividad y la satisfacción en el trabajo.

Basados en un tamaño muestral de un poco más de 600 personas ocupadas en el ámbito de la República Argentina y sus respectivas respuestas sobre la temática en una encuesta online estructurada, los especialistas corroboraron que el 82% de los encuestados considera que valora mucho más la salud emocional y mental luego de la pandemia. Además, también se infiere de las respuestas el crecimiento de la valoración de aspectos como el equilibrio entre la vida personal y trabajo (80%); la calidad de los vínculos interpersonales (75%); la satisfacción laboral (72%) y la calidad del sueño (70%).

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Según le reveló a LA NACION Rosario Dezeo, subgerenta de Redes de Profesionales, Relevamientos y Operaciones de IDEA, la pandemia fue un habilitador de la conversación sobre el confort de los colaboradores en las compañías. “Ya veníamos desde hace tiempo con la sospecha de que la valoración y la conciencia que teníamos en torno a la salud emocional en este ámbito había cambiado”, dice.

A la par Luciana Paoletti, gerente de Contenidos y Comunicaciones de IDEA, señaló: “Estos resultados permiten poner el tema sobre la mesa. Nuestro objetivo es generar información valiosa sobre la salud emocional y mental en el mundo laboral, un tema que pasó a ser clave”. De acuerdo con ella, este tipo de transformaciones sociales ponen énfasis en que las organizaciones deben aprender a ‘cuidar la máquina’ y brindarle el combustible que necesita para que funcione y esté en línea con el objetivo empresarial.

En relación con las variables del entorno laboral que los trabajadores consideran positivos para su salud emocional, el 94% de los encuestados atribuyó como principal factor al buen clima laboral. Este aspecto se valoró más que la seguridad económica que se situó en segundo lugar con un 92% de las respuestas.

Tras ser consultados sobre qué tanto ha cambiado el valor que le dan a ciertas variables vinculadas al trabajo luego de la pandemia, el 89% de los sondeados indicó que valoran mucho más que antes la flexibilidad horaria. Continuamente, se subraya la importancia de un entorno de trabajo seguro y saludable, con un 83,2% de los participantes reportando un cambio significativo en la prioridad que le otorgan a esta noción. Y, en tercera instancia, más del 80% coincidió en que la posibilidad de trabajar de manera remota también ha ganado relevancia.

“Hoy, muchos evitan trabajar en entornos que pongan en riesgo su salud mental. Cada vez son más las empresas que nos consultan para promover ambientes laborales que favorezcan el bienestar emocional de sus colaboradores, disminuyendo los niveles de estrés y cuidando la salud de su principal capital que son las personas”, señaló María Roca, directora de INECO Organizaciones.

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De igual modo, así como a los participantes se les preguntó sobre las transformaciones que habían experimentado en sus propias percepciones, también se les consultó si notaron cambios en la forma en que las empresas que integraban abordaban la salud emocional y mental en el ámbito laboral en el último tiempo. En ese sentido, el 62,3% de los encuestados consideró que se produjo un giro muy significativo o completo en la preocupación por generar una cultura de trabajo saludable. Además, el 46,3% de ellos señaló un cambio muy importante o total en el valor que le dan las empresas a la ejecución de beneficios vinculados a la salud mental y emocional, como aplicaciones, soporte profesional y/o descuentos.

Otros de los hitos que se destacaron en el informe fueron:

El 37% de los encuestados consideró seriamente renunciar a su trabajo por cuestiones de salud emocional y mental post-pandemia7 de cada 10 trabajadores creen que el trabajo impacta muy significativamente en su calidad de vida y en su salud emocional y mentalEl 76,3% manifestó el deseo de tener una agenda de trabajo que no sature la energíaLa importancia de contar con un buen líder ha aumentado para el 71,7% de los encuestados