WASHINGTON.- Luego de que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, decidiera no buscar la reelección a la Casa Blanca en las elecciones de este noviembre, en las que debía enfrentar al candidato republicano Donald Trump, la vicepresidenta, Kamala Harris, acumuló suficientes delegados para asegurarse su lugar como la candidata demócrata, según un sondeo de The Associated Press que fue replicado por los principales medios de Estados Unidos. Así, de forma rápida, la cúpula del partido cerró sus filas en torno a la dos del gobierno.

El firme apoyo a Harris parece representar un intento por dejar atrás varias semanas de incertidumbre interna por el futuro político de Biden, en medio del objetivo de derrotar a Trump y cuando faltan menos de cuatro meses para las elecciones. De hecho líderes del partido, funcionarios, gobernadores, organizaciones y legisladores respaldaron rápidamente a Harris apenas un día después de que Biden abandonara la carrera presidencial.

Incluso, los fondos recaudados alcanzaron un récord y en un día acumularon más de US$80 millones el lunes luego de que aún con el actual presidente en carrera cayeran en picada tras su pobre desempeño en el debate contra el republicano. La campaña de Harris generó también una oleada de interés, con más de 28.000 nuevos voluntarios registrados desde el anuncio.

Varias delegaciones estatales se reunieron el lunes para confirmar su apoyo a Harris, incluidas la de Texas y la de California, su estado natal. Por la noche, tenía el respaldo de muchos más de los 1976 delegados necesarios para ganar en primera ronda la nominación. Específicamente, cuatro gobernadores de estados del Medio Oeste que los demócratas deben ganar -Gretchen Whitmer de Michigan, Tim Walz de Minnesota, Tony Evers de Wisconsin y JB Pritzker de Illinois- se mostraron a favor de Harris. Se sumaron además Andy Beshear de Kentucky, Roy Cooper de Carolina del Norte, Gavin Newsom de California y Josh Shapiro de Pensilvania. Muchos de esos gobernadores podrían ser considerados para completar la fórmula.

El presidente del Partido Demócrata de California, Rusty Hicks, señaló que entre el 75% y el 80% de la delegación estatal participó el lunes en una llamada y otorgaron su apoyo a Harris de forma unánime. “No he escuchado de nadie que mencione o pida a otro candidato”, dijo. “La votación de esta noche fue trascendental”.

En tanto, la vicepresidenta cuenta con el respaldo de más de 40 senadores demócratas -entre ellos el líder de la mayoría, Chuck Schumer- y casi 100 miembros de la Cámara de Representantes.

En este marco la presidenta emérita de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, quien había sido una de las personas que se abstuvieron de expresar su apoyo a Harris inicialmente, dijo el lunes que brindaría su “apoyo entusiasta” al intento de Harris por liderar al partido.

La agencia AP remarca, sin embargo, que todavía no considera a Harris la nueva virtual candidata presidencial del Partido Demócrata. Esto se debe a que los delegados todavía son libres de votar por el candidato de su elección en la convención de mediados de agosto, o si los demócratas celebran una votación nominal virtual antes de ese encuentro.

En un comunicado, Harris respondió al recuento de AP, diciendo que está “agradecida con el presidente Biden y con todos en el Partido Demócrata que ya han puesto su fe en mí”. “Espero llevar nuestra causa directamente al pueblo estadounidense”, dijo.

Las preocupaciones por la capacidad de Biden para desempeñarse en el cargo fueron reemplazadas por nuevas muestras de unión después de un cambio sísmico en la contienda presidencial que trastocó los planes de los dos principales partidos políticos para las elecciones.

Harris planea estar el martes en Wisconsin, un estado crucial para la contienda electoral. El evento en Milwaukee -que la semana pasada albergó la Convención Nacional Republicana donde nominaron a Trump formalmente- será su primer acto de campaña a gran escala desde que anunció su candidatura.

Obtener la nominación es solamente el primer paso en una extraordinaria lista de misiones a las que se enfrenta Harris después de la decisión de Biden, de lo que se enteró en una conversación telefónica con el presidente el domingo por la mañana. Si logra asegurar la nominación, también debe elegir un compañero de fórmula y poner en marcha una enorme operación política para impulsar su candidatura en lugar de la de Biden.

La Convención Nacional Demócrata nen la que se nominará formalmente al candidato está programada para celebrarse del 19 al 22 de agosto en Chicago, pero el partido había anunciado antes de que Biden abandonara la contienda que llevaría a cabo una votación a distancia para nominar formalmente a Biden antes de que empezaran los procedimientos presenciales para acelerar los procesos.

El comité de normas de la convención tiene previsto reunirse esta semana para finalizar su proceso de nominación con una votación a distancia para el 1 de agosto de ser posible, anunció el partido el lunes. El proceso quedaría completado para el 7 de agosto.

“Podemos y seremos rápidos y justos mientras llevamos a cabo esta nominación”, dijo Jaime Harrison, presidente del Comité Nacional Demócrata, en una conferencia telefónica.

El partido señaló que la votación nominal a distancia contaría con varias rondas de votación en caso de que haya varios candidatos que cumplan con los requisitos. Para ser elegible, los candidatos deben contar con la firma electrónica de por lo menos 300 delegados de la convención.

En un mensaje a su equipo de campaña desde Wilmington, Delaware, Harris dijo este lunes que las últimas semanas han sido una “montaña rusa”, pero expresó confianza en su nuevo equipo.

“Tengo la intención de ganarme el merecimiento de esta nominación y salir vencedora”, declaró. Prometió “unir a nuestro Partido Demócrata, unir a nuestra nación, y ganar esta elección”.

Rápidamente viró a los asuntos que serán primordiales durante su campaña contra Trump durante los próximos 100 días, marcando un contraste entre su época como fiscal con las condenas del republicano por delitos graves. “Conozco al tipo de personas como Donald Trump”, subrayó, proyectándose a sí misma como una defensora de la oportunidad económica y el acceso al aborto.

“Nuestra lucha por el futuro es también una lucha por las libertades”, indicó. “La posta está en nuestras manos”.

Biden se unió a la reunión mediante una llamada desde su casa en Rehoboth Beach, Delaware, donde se recupera de Covid-19, para brindar su apoyo a Harris.

“El nombre en el tope de la boleta ha cambiado, pero la misión no ha cambiado en lo absoluto”, dijo Biden en sus primeras declaraciones públicas desde que anunció su decisión, prometiendo que “no se irá a ningún lado” y que planea hacer campaña a nombre de Harris.

Sobre su decisión de abandonar su campaña de reelección, Biden comentó que “era lo correcto” y, al pasarle el liderazgo a Harris, le dijo: “Te estoy observando, muchacha. Te quiero”.

Agencia AP y The New York Times