Los cinco partidos realizados este jueves por trofeos que pone en juego Conmebol terminaron de configurar los cruces de cuartos de final de la Copa Libertadores y la Copa Sudamericana. En el primer certamen, la etapa de octavos de final se cerró con el triunfo de São Paulo por 2-0 sobre Nacional, de Uruguay, en Brasil y con el 1-0 de Bolívar contra Flamengo, de Brasil, en Bolivia. En el segundo, Armeliano y Libertad, de Paraguay en ambos casos, no pasaron del 0-0 y este último se impuso por 4-3 en la resolución por penales; a la misma vía debió recurrir Cruzeiro en Brasil para eliminar a Boca Juniors, al que superó por 2-1 en el tiempo regular y por 5-4 en la definición, y Belgrano cayó en Córdoba contra otro brasileño, Paranaense, que lo derrotó por 2-0.

Esos resultados determinaron los últimos cinco clasificados de las dos competencias, que se tomarán un pausa para continuar: las próximas series, que decidirán a los semifinalistas, tendrán lugar en las semanas de los miércoles 18 y 25 de septiembre. ¿Qué habrá en medio? Poca actividad, por cierto: a mediados de la próxima semana, ligas nacionales y algo de Copa Argentina; en la siguiente, una fecha de la clasificatoria sudamericana rumbo al Mundial (el jueves 5, Argentina vs. Chile), y en la subsiguiente, otra jornada de la eliminatoria para Canadá-Estados Unidos-México 2026 (el martes 10, Colombia vs. Argentina).

Esos cuatro emparejamientos de Libertadores y esos cuatro de Sudamericana estarán ampliamente dominados por Brasil en cuanto a presencias: de los 16 equipos protagonistas, nueve serán del país verde-amarelo. ¿Y cuántos argentinos? Apenas tres: River Plate, por el torneo principal, y Racing y Lanús, por el secundario. Completarán un club uruguayo, uno colombiano, uno paraguayo y uno chileno.

Se trata de otro año de supremacía brasileña en las competencias de Conmebol, con mayoría absoluta, 56,2%, entre los clubes que permanecen en pie en la suma de los dos campeonatos. Y con superioridad directa sobre los argentinos hasta el momento: de las cuatro llaves de octavos de final que enfrentaron a los “hermanos” e “irmãos”, los conjuntos del país de más al norte ganaron todas. Mineiro eliminó a San Lorenzo de Almagro por la Libertadores, y por la Sudamericana Cruzeiro desplazó a Boca, Fortaleza marginó a Rosario Central y Paranaense eyectó a Belgrano.

Es más: tres cuadros de Brasil quedaron fuera en esos octavos de final, pero todos a manos de compatriotas. Grêmio cayó frente a Fluminense y Palmeiras se despidió ante Botafogo en el certamen mayor, y Bragantino se marchó por culpa de Corinthians en el restante. Son tantos los clubes brasileños que quedan compitiendo en el nivel sudamericano que seis de los nueve chocarán con connacionales, y por ende, tres quedarán a un lado del camino, pero a la vez como mínimo habrá tres semifinalistas de ese país sobre ocho totales.

Los cruces quedaron establecidos como figura a continuación:

Copa LibertadoresFluminense (Brasil) vs. Mineiro (Brasil)Colo Colo (Chile) vs. River Plate (Argentina)Botafogo (Brasil) vs. São Paulo (Brasil)Flamengo (Brasil) vs. Peñarol (Uruguay)Copa SudamericanaFortaleza (Brasil) vs. Corinthians (Brasil)Paranaense (Brasil) vs. Racing (Argentina)Libertad (Paraguay) vs. Cruzeiro (Brasil)Lanús (Argentina) vs. Independiente Medellín (Colombia)

En cada caso, el mencionado en primer término será el local en el partido inicial, y su rival lo hará en el desquite.

A pesar de la numerosa presencia brasileña en la próxima etapa de cada competencia, solamente Racing se enfrentará con uno de esos nueve oponentes, y Paranaense no es de los más fuertes; de hecho, ni siquiera ganó su grupo (fue superado por Armeliano en el E). Lanús sí se medirá con un vencedor de una zona, Independiente Medellín (primero de la A). Y River se las verá con un equipo dirigido por el argentino Jorge Almirón, dos veces subcampeón de la Libertadores (la última, en 2023, al mando de Boca): su Colo Colo no tuvo una buena rueda de grupos (resultó escolta en el A), pero se impuso con suficiencia al colombiano Junior, venciéndolo tanto en Santiago como en Barranquilla.