Copa Libertadores: Gremio, que vive de gira para ser local, le ganó al campeón Fluminense
El comienzo de los octavos de final de la Copa Libertadores tuvo el triunfo del equipo que lleva un largo tiempo de destierro a causa de las graves inundaciones que mantuvieron aislada a la ciudad ...
El comienzo de los octavos de final de la Copa Libertadores tuvo el triunfo del equipo que lleva un largo tiempo de destierro a causa de las graves inundaciones que mantuvieron aislada a la ciudad de Porto Alegre, que muy lentamente va recuperando una normalidad que aún no alcanza al estadio Arena do Gremio. Ya habituado a peregrinar por otras canchas, Gremio, en gran reacción, venció 2-1 al campeón y desconocido Fluminense, en un partido disputado en Curitiba.
La figura de la noche en el equipo que tuvo a tres argentinos entre los titulares fue el lateral izquierdo Reinaldo, un veterano de 34 años que nunca salió del fútbol brasileño. Fluminense, que conserva a algunos futbolistas de la final ante Boca y sumó al zaguero Thiago Silva (39 años), ganaba 1-0, con una definición cruzada de Lima que no llegó a despejar el arquero Agustín Marchesín.
Quedaba poco más de media hora y Gremio dio vuelta la historia en tres minutos. El árbitro argentino Darío Herrera sancionó correctamente una mano dentro del área del juvenil lateral Esquerdinha, reemplazante del ausente Marcelo. El penal lo convirtió Reinaldo con un estupendo zurdazo, fuerte y alto.
Gremio tomó un envión que aprovechó enseguida, con un tiro libre abierto que Reinaldo ejecutó en modo de centro y se le terminó metiendo por el segundo palo al experimentado arquero Fábio (43 años). A esa altura del encuentro ya habían sido reemplazados en Gremio los argentinos Cristian Pavón y Franco Cristaldo. Al margen del encuentro, por una molestia muscular, quedó Walter Kannemann, al igual que el delantero Diego Costa (35 años), de destacado paso por Atlético de Madrid. El centro-delantero de Gremio fue el dinamarqués Martin Braithwaite, con pasado en Barcelona y Espanyol.
Lo más destacado de Gremio 2 - Fluminense 1
En el final subió la temperatura por la expulsión del zaguero de Gremio Ely, a instancias del VAR, que convocó a Herrera para que revisara un golpe de puño en el estómago a Ganso. Con un jugador más en los últimos 10 minutos, a Fluminense, que no contó con el goleador Germán Cano, no le alcanzó la arremetida final.
Gremio todavía padece las consecuencias de la dura inclemencia de las precipitaciones en Porto Alegre. No puede ser local en el estadio Arena do Gremio, que fue mucho más afectado que el Beira-Río, la cancha de Inter. Se especula con que Gremio podría volver a su tierra en septiembre. Lleva 13 partidos jugando en otros estados. Lo hizo en Santa Catarina, Paraná y para recibir a Fluminense se trasladó hasta Curitiba, a 741 kilómetros de su casa. Una situación traumática que derivó en un decaimiento deportivo, del cual está saliendo en las últimas semanas. En el Brasileirão llegó a estar en puesto de descenso; tomó aire y salió de la zona roja al obtener 13 de los últimos 15 puntos; junto con Fortaleza son los dos conjuntos de mayor efectividad en la segunda rueda.
Dentro de un desarrollo parejo en el primer tiempo, con más posesión de la pelota de Fluminense, Gremio fue más profundo y directo en ataque. Los avances gaúchos se orientaron bastante sobre la derecha, zona de Pavón, que probó al arco con un volea y un remate de media distancias, ambos desviados. El ex-Boca dio una asistencia para un disparo de Cristaldo que tampoco acertó al arco.
Pero la situación más clara de la primera etapa fue para Fluminense, con una entrada libre al área del colombiano Jhon Arias, cuya definición fue desviada parcialmente por Marchesín y despejada por Ely a centímetros del arco. En el segundo período llegaron los goles. Otro golpe para Fluminense, que en el Brasileirão está en ubicación de descenso. En la Copa Libertadores había ganado cómodamente su grupo, con una amplia ventaja sobre Colo Colo, Cerro Porteño y Alianza Lima. Anoche perdió el invicto ante un Gremio que vive de gira para ser local.