Este mediodía, el diputado nacional Ricardo López Murphy contó que su hija Analía murió. La noticia generó una fuerte repercusión en todo el arco político local, que rememoró los últimos meses en los que el legislador de Hacemos Coalición Federal (HCF) se dividió entre la Argentina y Estados Unidos, donde ella vivía, para cumplir su labor en el Congreso y al mismo tiempo acompañar a su hija en su enfermedad.

Entre esos recuerdos no pasó por alto entre los compañeros de bancada la actitud que tuvo el diputado en medio de la votación por la Ley Bases en la Cámara baja, el pasado 28 de junio, cuando se aprobó finalmente el proyecto con 147 positivos, entre ellos el del propio López Murphy, quien volvió especialmente desde Estados Unidos para votar a favor de la iniciativa del Gobierno. Ese día la gestión libertaria consiguió su primer proyecto legislativo, ya avalado por el Senado.

Tampoco se olvidaron cerca del legislador lo que hizo el presidente Javier Milei luego del gesto que tuvo el dirigente de HCF. Dos días después, el 30 de junio, el mandatario dio una entrevista en la que tildó de “fracasado” al diputado por haber recomendado salir ahora del cepo, en contra de las pretensiones suyas y de su ministro Luis “Toto” Caputo.

Cuando dio su discurso en el recinto, en la tarde del 27 de junio, López Murphy dijo que no estaba de acuerdo con el RIGI y criticó que desde el Ministerio de Economía todavía evitaran levantar las restricciones a la compra de dólares.

“Terminado este proceso , el Gobierno debe gestionar y para eso es imprescindible que envíen el Presupuesto 2024 y 2025. El país necesita tener un plan financiero y saber el programa monetario. Y para tener un plan financiero y un programa monetario necesitamos saber el régimen cambiario. Otra paradoja u otra cosa disparatada: que persista después de esta ley el cepo massista-kirchnerista. Continúa ese cepo de características maquiavélicas. No funciona, no ha funcionado, ni funcionará”, sostuvo en una encendida alocución. Convencido de la necesidad de cortar con los controles sobre la divisa extranjera, el “Bulldog” dijo que la Argentina necesitaba una “economía para adultos” y pidió: “Basta de infantilismo”.

Fue tras eso que Milei lo fustigó. “Que antes se fije cómo le fue a él en la historia. Si quiere tomar esas decisiones, que vaya y gane las elecciones para sentarse en este sillón ”, marcó y hasta aseguró que cuando López Murphy estuvo como ministro de Economía de Fernando de la Rúa, en 2001, “lo echaron de una patada”.

“Hay algunos que viven en Narnia y proponen estupideces. Ni es cierto lo que dice el fracasado de López Murphy y tampoco es cierto lo que dice el resentido fracasado de Melconian. Son parte de la decadencia argentina. Son parte del fracaso argentino los dos. ¿Acaso López Murphy no fue parte de La Alianza? Y Melconian se quedó en boxers. Terminó yendo al Banco Nación y se fue. Son gente que estuvo todo el tiempo en la economía. Que me vengan a hablar tipos que fracasaron rotundamente... que digan lo que quieran”, indicó el líder libertario sobre el diputado, que supo ser un ferviente crítico del kirchnerismo y que, al igual que él, milita una agenda liberal en lo económico y conservadora en lo social. En otras oportunidades lo había tildado de “traidor” y “basura”.

En ese entonces, estos dichos del Presidente causaron un fuerte estupor e indignación entre los allegados al diputado, que cuestionaron duramente a Milei por atacarlo cuando había vuelto solo a votar la ley que el Gobierno necesitaba, mientras su hija atravesaba un complicado momento de salud. Hoy esos sentimientos se reavivaron y el tema formó parte de las conversaciones del día, según pudo saber LA NACION.

Quien se expresó públicamente al respecto fue el diputado nacional de Pro Alejandro Bongiovanni, que escribió un sentido mensaje en su cuenta de la red social X.

“Quienes conocemos y queremos a Ricardo sabemos lo mucho que ha sufrido por el largo padecimiento de su hija, lo mucho que ha rezado y lo mucho que ha ido y venido a Estados Unidos para acompañarla. En el Congreso, en la última sesión de Diputados, me contó con lágrimas en los ojos que los médicos le habían dicho que el desenlace era inevitable. Había venido a votar y cumplir sus obligaciones representativas. Y partiría luego para volver a su hija”, reconstruyó.

También describió a su colega como “decente, inteligente y siempre caballero”, y como uno de los “mejores hombres” que dijo conocer. “Lo admiro profundamente, me honra su amistad y me pesa su dolor. Ojalá él y su familia puedan sobreponerse a este difícil momento”, concluyó el legislador santafesino.

Quienes conocemos y queremos a Ricardo sabemos lo mucho que ha sufrido por el largo padecimiento de su hija, lo mucho que ha rezado y lo mucho que ha ido y venido a EEUU para acompañarla.

En el Congreso, en la última sesión de Diputados, me contó con lágrimas en los ojos que los… https://t.co/ZtBzaiCN6J