Bullrich pidió declarar la aviación como esencial y advirtió a Aerolíneas: “Si no se ordena, se privatiza”
En un día con complicaciones...
En un día con complicaciones en Aeroparque por las asambleas de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) y de la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA), con vuelos de Aerolíneas Argentinas y Flybondi derivados a Ezeiza, demorados y suspendidos, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, se mostró enojada con la situación. Entonces, pidió a sus pares de la Secretaría de Trabajo que inicien gestiones para declarar la aviación como servicio esencial y les mandó una advertencia a los trabajadores de la compañía estatal, al decirles que si no se ordenan, la empresa se va a privatizar “en cualquier momento”.
“Tenemos que declarar ya la esencialidad y hacerla cumplir a rajatabla en los aeropuertos, basta de jorobar a la gente”, sentenció Bullrich este viernes a la mañana en LN+ y acotó: “Tendrán que empezar a pagar las empresas y Aerolíneas Argentinas tendrá que alinearse a una estrategia. Y los que no se alinean tendrán que tener consecuencias. El país tiene que tener orden económico, jurídico y público”.
Bajo esa postura, la funcionaria aseguró que si se logra decretar la esencialidad, desde el Ministerio de Seguridad podrían colaborar con hacer cumplir la medida. “Es una decisión que tiene que tomar el Ministerio de Trabajo , pero también por otro lado Aerolíneas Argentinas sabe que si no se ordena, se privatiza en cualquier momento”, avisó, pese a que esta idea del Ejecutivo no pudo avanzar en el Congreso cuando se debatió la Ley Bases.
Asimismo Bullrich destacó que, como los gremios saben la postura del gobierno nacional, van a asambleas pero no hacen paros totales, aunque de todas formas esto afecte la aeronavegación. “Te hacen daño y tenemos que trabajar sobre eso, porque el orden público y el de la vida de la gente son fundamentales”, indicó la ministra de Javier Milei.
En esa línea también destacó la reducción en el número de piquetes en comparación con la gestión anterior, lo que -de acuerdo a lo que manifestó- favorece la circulación en el centro porteño, como también la acción de su cartera ante los bloqueos en empresas, tema para el que diseñan un nuevo protocolo de actuación para las fuerzas que se publicará pronto.
Ruidos políticosPor otra parte, la ministra evitó ahondar sobre la interna con el expresidente Mauricio Macri y dijo que todo “se está ordenando”. Solo reiteró su postura de que ella es oficialista y el antes mandatario se identifica como opositor, lo que deriva en los cruces que tuvieron en el último tiempo. “Si sos oposición, buscás la diferencia. Si sos gobierno, te comés algún sapito, toda la vida, pero tirás el carro en la misma dirección, que va muy bien”, contrastó.
Segura de que Milei en el mundo es “una estrella total”, Bullrich ahondó sobre los problemas que tuvieron La Libertad Avanza (LLA) y también Pro en el Congreso y puso una metáfora para analizarlo. “Nosotros tiramos el carro, el carro está lleno de melones, uno tiene una rayita negra, el otro está un poco machucado, hay de todo. Uno dice: ‘Empujo el carro porque esto ordena la macro, la calle, genera la lucha contra el crimen organizado, bajan 70% los homicidios en Rosario en ocho meses, encapsula las bandas, se ordena la política social, va marchando. El Congreso es como una vida aparte, ahí agarran un melón y dicen ‘tiene una rayita negra, está machucado’, van al detalle”, comparó y marcó: “En vez de tener el riesgo país más bajo, cada vez que el Palacio se mueve hay problemas en la economía. Hay que ordenar, bajar el ruido. Si bajás el ruido del Parlamento, todo marcha con más tranquilidad”.
A su vez, la ministra alegó que el oficialismo es un “conglomerado muy nuevo”, con gente que no se conocía, y que además el resto de la política está fragmentada. “Hemos decidido darle un orden. ‘Decidite: ¿vas a ayudar o no? Si vas a mirar la manchita del melón...’”, comentó, en lo que sí pareció un mensaje a Macri, pero también en una semana donde se expulsó a la diputada Lourdes Arrieta y al senador Francisco Paoltroni del espacio por diferencias de posturas con la Casa Rosada.
SIDE y jubilacionesBullrich también ahondó sobre los dos reveses más importantes que tuvo el Gobierno en el Congreso: el rechazo al DNU de los fondos de inteligencia y el avance de la movilidad jubilatoria de la oposición, que el Presidente ya dijo que vetará.
Con respecto a los montos para la SIDE, Bullrich reiteró su postura de que no puede informar públicamente el destino de esos 100 mil millones de pesos por un tema de seguridad, pero destacó la necesidad de reforzar el área en medio de un contexto mundial complejo. “Acá lo que se quiso plantear fue algo transparente. Tengo la Dirección Nacional de Inteligencia Criminal, que depende de mí y tiene la inteligencia de las fuerzas, que está ocupada del delito complejo. Estamos en carreta. Y nosotros necesitamos hacer un salto de calidad en la ciberseguridad, ciberdelito, en los elementos que utilizamos”, explicó.
Además, dijo que por las jubilaciones ella misma habló con los legisladores del ex Juntos por el Cambio y recordó cuando en 2017 tuvieron los incidentes afuera del Congreso, ese día que quisieron hacer avanzar la reforma jubilatoria macrista. No fue consultada por la represión a jubilados afuera del Palacio Legislativo el miércoles, cuando un grupo se fue a quejar por el veto a la nueva fórmula previsional que aplicará Milei.
La detención del diputado misionero y su hermanoEn tanto, la ministra de Seguridad se refirió a la detención del diputado Germán Kiczka y su hermano Sebastián, imputados por distribuir videos y fotos de situaciones de abuso sexual de menores, y dijo que en su ministerio tenían claro que no se habían ido del país y que el legislador estaba en Corrientes. “La llaman a la Policía de Corrientes pero nosotros teníamos la información de que la detención era inminente”, indicó.
Además sobre el caso manifestó: “Por un viejo convenio de la Policía de la Ciudad con la red más importante de protección en el mundo que avisa cuando alguien se conecta desde un país avisaron y se le avisó a Misiones, inmediatamente se le da aviso a la Policía de Misiones, que actúan inmediatamente, se prenden las lamparitas. El desfasaje es no haber tenido la idea de que podía escaparse, irse. Ellos durante un tiempo largo no fueron alertados del proceso en marcha hasta el pedido del desafuero, ahí se enteraron. Creo que en una semana se pudo detener a los dos, eso es lo importante, que el sistema funciona y que más allá de la conmoción de esa semana teníamos la total y absoluta certeza de que estaban acá y los íbamos a agarrar”.