Una ola de temor se ha desatado en Kentucky tras la distribución de panfletos racistas atribuidos al Ku Klux Klan, coincidiendo con la investidura de Donald Trump como presidente de los Estados Unidos. Los volantes, repartidos en localidades como Ludlow y Fort Wright, incitan a la persecución de migrantes, promoviendo mensajes de odio y buscando reclutar adeptos para esta organización supremacista.

Los mensajes de odio en los volantes de Kentucky

Los panfletos contienen una caricatura del Tío Sam expulsando violentamente a una familia de migrantes. La ilustración muestra al personaje patriótico sosteniendo un documento con el mensaje: “Necesitamos su ayuda. Vigile y rastree a todos los inmigrantes. Denúncielos a todos”, informaron medios como WKRC Local 12. Además, los volantes invitan a los inmigrantes a “evitar la deportación” sugiriendo que “se vayan ahora”, al tiempo que incluyen un número de teléfono y una invitación a unirse al grupo.

Este material propagandístico, considerado perturbador y alarmante, ha generado temor en las comunidades locales, en especial entre las familias migrantes. Las autoridades han recibido denuncias y han pedido a las personas que se sientan amenazadas que reporten cualquier actividad sospechosa.

Reacción de las autoridades de Kentucky

El departamento de Policía condenó enérgicamente la distribución de estos volantes, calificándolos como “propaganda repugnante y basura odiosa”. En un comunicado publicado en Facebook -y que luego borraron por fuertes comentarios recibidos-, las autoridades locales afirmaron estar investigando los hechos y reiteraron su compromiso con la seguridad de la comunidad.

“Estamos al tanto y ya hemos recibido una denuncia por esta propaganda perturbadora y repugnante del KKK que se está difundiendo en nuestra comunidad. Esta basura odiosa también ha aparecido en otras ciudades”, indicó la policía.

Contexto histórico y preocupaciones actuales

Este no es el primer caso de propaganda del Ku Klux Klan reportado en la región. En noviembre pasado, se registraron incidentes similares en Indiana, lo que lleva a los expertos a advertir sobre el resurgimiento de estos grupos de odio. La fecha de distribución, coincidiendo con el día de la inauguración de Donald Trump, no es considerada una casualidad por parte de las autoridades.

Jon McClain, jefe de policía de Bellevue, Kentucky, destacó en una entrevista con The Washington Post la preocupación que este tipo de actos genera en las comunidades. “Nunca había visto algo así. Fue algo alarmante para nuestra comunidad. No creo que sea una coincidencia”, declaró.

Impacto en la comunidad y medidas a tomar

La distribución de estos volantes ha sembrado miedo entre los residentes, especialmente entre los migrantes que se sienten atacados por estos mensajes. Mientras tanto, las fuerzas de seguridad piden a la población mantenerse alerta y denunciar cualquier incidente relacionado con estos panfletos. La policía también está colaborando con grupos comunitarios para promover un ambiente de inclusión y apoyo.

La distribución de estos volantes racistas pone de manifiesto la persistencia de grupos de odio en Estados Unidos y la necesidad de combatir el discurso extremista. La respuesta rápida de las autoridades y la solidaridad de las comunidades locales son clave para enfrentar estas amenazas y garantizar la seguridad y la dignidad de todas las personas, finaliza el medio.