Agentes del Departamento de Parques y Vida Silvestre detectaron un mejillón cebra en estado larvario en una muestra de plancton en el río Colorado, tomada durante una inspección de rutina. Luego del descubrimiento, se realizaron dos pruebas más, que respaldaron el hallazgo de esta especie invasora en estado larvario en el plancton de la zona costera de Grand Valley.

El descubrimiento fue calificado como “devastador” por el impacto ecológico y económico que podría tener la presencia efectiva de mejillones cebra en la zona. Si bien las autoridades de Colorado aclararon que no se comprobó la presencia de ejemplares adultos y que las muestras positivas fueron detectadas mediante pruebas con microscopio, todas las agencias del estado están en alerta por el peligro potencial.

Qué son los mejillones cebra

Según un reporte del Servicio de Pesca y Vida Silvestre de los Estados Unidos (FWS por sus siglas en inglés) estos moluscos de agua dulce originarios de los mares Negro, Caspio y Azov de Europa del Este, se consideran una de las especies invasoras más destructivas en América del Norte, ya que por la velocidad de su reproducción las poblaciones de mejillones cebras suelen alcanzar densidades extremadamente altas y apoderarse de los cuerpos de agua, causando un daño ambiental y económico significativo.

Su nombre deriva del patrón de rayas característico de su caparazón y según explica la FWS los mejillones cebra pueden multiplicarse hasta 100.000 individuos por metro cuadrado. Además, cada mejillón puede filtrar un litro de agua al día, eliminando el zooplancton y el fitoplancton del agua en la que habitan con consecuencias devastadoras para el medioambiente.

Entre los impactos adicionales que la presencia de mejillones cebra puede provocar desde FWS destacan:

Interrumpir la cadena alimentaria de los ecosistemas afectadosAsfixiar a los mejillones autóctonos;Causar brotes de algas verdeazuladasObstruir las tomas de agua, los sistemas de suministro y otras infraestructuras hídricasQué hacer frente a la detección de la especie

Frente a ese terrible panorama tras la detección de las muestras en estado larvario las autoridades de Colorado anunciaron que se están realizando más muestreos para determinar si el hallazgo indiciario debe reclasificarse como un hallazgo positivo, especialmente en las zonas del río de movimiento más lento, que es donde las colonias suelen ubicarse. Esas áreas, además de los estanques, son las que particularmente preocupan a los expertos en una primera instancia.

“Esta noticia es devastadora ya que el hecho de que nuestro canal y el río Colorado hayan dado positivo aumenta la amenaza de esta especie invasora que podría afectar a todos en Grand Valley, expresó Tina Bergonzini, gerente general de la Asociación de Usuarios de Agua de Grand Valley en declaraciones reproducidas por un medio local.

Para la funcionaria la potencial presencia de mejillones cebra pone en riego el agua potable y posee otras consecuencias que no se pueden minimizar. En esa línea destacó que mientras avanzan las pruebas para determinar objetivamente el grado de alerta desde la Asociación se realizarán todos los esfuerzos necesarios para proteger la infraestructura hídrica y la salud de las personas.

Por su parte desde el Departamento de Parques y Vida Silvestre del estado solicitaron que las personas tomen precauciones y sean proactivas para evitar la potencial propagación de los moluscos vaciando, limpiando y secando todos los recipientes con agua después de su uso.