Su más reciente posteo en Instagram recordó al mundo su gran historia de amor. “Mi querida Keely, mi bella chica de ojos marrones, mi norte, mi sur, mi este y oeste. Todo mi corazón… Si me quedo atrás, esperame”, escribió Pierce Brosnan (71), quien hace tan sólo unos días celebró su 23° aniversario de bodas con su segunda mujer, la periodista y conductora de televisión Keely Shaye Smith (60).

El actor irlandés y Keely se conocieron en 1994 durante una fiesta en México. El flechazo, dicen ellos mismos, fue instantáneo. “Nada más verlo me resultó un hombre muy cautivador, alto, moreno y buenmozo. Llamaba la atención de todos y tenía un brillo especial en los ojos… Ahí entendí por qué las mujeres lo encontraban tan sexy”, reveló entonces la bella hawaiana quien, después de una inolvidable primera cita bajo las estrellas, hablando hasta las tres de la mañana, nunca se separó de él.

Si bien entonces la carrera de Brosnan estaba en su apogeo –era el sexto actor en interpretar al mítico agente James Bond en la pantalla grande–, la estrella atravesaba también uno de los momentos más duros de su vida: en 1991, apenas unos años antes de conocer a Keely, Pierce había perdido trágicamente a su primera mujer, la actriz australiana Cassandra Harris (madre de su hijo Sean, que hoy tiene 40 años), a causa de un cáncer de ovario. Tras la muerte de su compañera, el protagonista de la popular serie Remington Steel decidió adoptar a los hijos de ella, Charlotte –quien años más tarde moriría de la misma enfermedad que le costó la vida a su madre– y Christopher (51). Y fue su nuevo amor el que le dio fuerzas para seguir adelante. “Encontré una gran mujer en Keely Shaye, única. Ni aunque buscara un millón de veces encontraría a alguien tan bueno. Ella siempre fue muy amable y compasiva y me acompañó en mi duelo por Cassie”, confesó el actor nacido en Drogheda, Irlanda.

Después de siete años de relación, la pareja se casó en 2001 en una romántica ceremonia celebrada en la tierra natal del actor. “Ahora entiendo por qué Pierce quería que viniéramos a Irlanda. Está compartiendo una parte de su alma”, confesó en aquel momento su suegra, Sharon Smith, durante la exclusiva cobertura de la boda realizada por la revista HELLO! Dieron el “sí, quiero” en la abadía de Ballintubber, un santuario del siglo XIII que fue ambientado con cientos de velas y arreglos florales de rosas, lirios y lavanda, y continuaron los festejos en el castillo de Ashford con 120 invitados.

Padres de Dylan (27) –terminó sus estudios en la Escuela de Artes Cinematográficas– y de Paris (23) –artista plástico, modelo y actor–, Pierce y Keely formaron con el tiempo una de las parejas más admiradas y estables de Hollywood. “Viví un gran matrimonio que tristemente tuvo un final, y tuve la suerte de encontrar el amor de nuevo. Creo que estábamos destinados a encontrarnos y por eso le doy gracias a Dios todos los días. Amo de Keely su vitalidad y su pasión”, dijo él en 2018.

Mientras prepara su próxima película, Wolfland, dirigida por su hijo Sean, Brosnan pasa sus días en su fabulosa casa de Hawái junto a su mujer y disfruta de la visita de sus cuatro nietos: los hijos de Charlotte, Isabella (25) y Lucas (19) y los de Sean, Marley May (8) y Jaxxon, de un año y medio. Tan enamorado como el primer día, hace unos meses hizo pública una romántica declaración al cumplirse treinta años de aquella primera cita con Keely. “El 8 de abril de 1994 fue mi día de suerte. ¿Cómo iba a saber que ese día iba a entrar en tu vida, que mi destino estaba a punto de cambiar para siempre? ¡Feliz 30º aniversario! El tiempo vuela en las alas del amor”, definió así el profundo vínculo que lo une a su mujer.•